Una cesta con Los Pecos

A CORUÑA

Una cinta del grupo, un hidromasaje para pies y una sierra, entre los premios sorteados por varios pubs

17 dic 2008 . Actualizado a las 11:49 h.

«No son las cestas de años anteriores». Este comentario está en las calle desde que diversas entidades comenzaron con el reparto de los tradicionales obsequios navideños. La que rifan este grupo de amigos tampoco se acerca a la de un sorteo convencional. No trae cava, ni tampoco turrón. Sino una foto en revista, 5 kilos de pipas saladas, 150 escalofríos, un palomitero, una sierra radial... y así hasta medio centenar de artículos de lo más curioso. ¿Más ejemplos?: un hidromasaje para pies y una cinta de Los Pecos.

Desde hace siete años cuatro amigos -Lorenzo del Bar Egeo, Toño del Trataplán, Carlos del Cazuza y Rubén del Universal- organizan el sorteo con el fin de hacer propaganda de los locales que regentan. En uno de sus encuentros decidieron dar forma a una cesta muy original. Un bote de melocotones, una atornilladora o una lijadora orbital se mezclan con tecnología audiovisual, como una televisión LCD de 32 pulgadas, una grabadora de deuvedé dual de doble capa ultradelgada, un home cinema , un miniportátil que incluye wifi y bluetooth , o una cámara fotográfica de ocho megapíxeles.

El agraciado con la cesta, o colección de artículos que se pueden observar en el escaparate de la cafetería Universal, será quien posea la papeleta cuyas últimas cuatro cifras coincidan con el primer premio de la Lotería Nacional del 22 de diciembre, el Gordo de Navidad. El éxito de la iniciativa se comprobó pronto, ya que las diez mil papeletas que se encargaron para el sorteo se agotaron a los pocos días de ponerse a la venta .

Según señalan los organizadores, «puede que ésta sea la antepenúltima cesta de este tipo que se sortee». De hecho, dentro de 563 días, el café Universal cerrará sus puertas para siempre. Según sus encargados, el establecimiento, situado al comienzo de la calle San Andrés, se verá abocado al cierre al no poder asumir la renta que sus propietarios piden por arrendar el bajo.