El Materno acoge un curso impartido por los mejores especialistas del planeta en atención a politraumatizados
08 oct 2011 . Actualizado a las 06:00 h.El centro de formación tecnológica del Chuac cuenta con maniquíes que respiran, sudan, se quejan y responden a los fármacos. No hay nada en España que se le parezca. Especializado en la simulación y la robótica para el entrenamiento y la enseñanza de personal sanitario y de servicios de emergencias, es una de esas cosas que hacen del hospital coruñés «un centro de referencia en el mundo». Por eso estos días acoge un curso para la atención al enfermo politraumatizado que está siendo impartido por algunos de los mejores especialistas del mundo. Ahí están, por ejemplo, Fernando Turégano, jefe del Servicio de Cirugía General y Cirugía de Urgencias del Hospital Gregorio Marañón; Michael Stein, del Rabin Medical Center de Israel; Marc de Moya, del Harvard Medical School, o Peter Bartelmess, del Ostersund de Suecia.
El curso, según explica su director del mismo, Fernando Turégano, «trata de abordar los problemas de la segunda hora tras un traumatismo grave, teniendo, pues, un componente fundamental práctico de técnicas quirúrgicas en el laboratorio experimental, así como discusiones sobre casos clínicos y procesos de toma de decisiones en traumatizados. Va dirigido, pues, a todos aquellos cirujanos responsables de la toma de decisiones en trauma». Para el jefe de cirugía del Gregorio Marañón, que el curso se celebre en A Coruña no es una casualidad. Se hace «porque no hay en España un centro de formación como el del Chuac». Por eso han venido «los mejores».
El centro destaca por la dotación tecnológica de recreación, con simuladores de cirugía y maniquíes robóticos que reproducen fielmente las reacciones del organismo humano. «Los primeros gran beneficiados son los médicos y el personal del propio hospital ya formado y, sobre todo, los residentes», subrayó Javier Aguirrezabalaga, coordinador de formación.
«No hay en ningún hospital de España ningún centro de formación como el de A Coruña»
Fernando Turégano