Derriban el primer piso de una de las torres de Tabacos por superar la altura permitida
A CORUÑA
La única planta construida excedía en 60 centímetros el límite máximo autorizado en el plan general
01 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.Las dos torres de apartamentos proyectadas en el solar de Tabacos solo levantan una planta del suelo y así estuvieron durante los últimos seis años. La crisis inmobiliaria obligó en el 2010 a la promotora a parar las obras en el primer piso y esperar a que la depresión económica escampara. Hace un año, intentaron reanudar los trabajos según la licencia que le habían dado en el 2007, pero una denuncia de la asociación Arco Iris advirtió de que el proyecto no estaba adaptado a la normativa urbanística vigente. Así que la constructora se vio obligada a solicitar una nueva licencia y adaptar el proyecto al plan general del 2013. Lo hicieron, el Ayuntamiento les dio el permiso y hace unos días se pusieron manos a la obra. Pero no para continuar lo ya construido, sino para derribar una parte. La culpa la tienen los 60 centímetros que superan lo permitido por la nueva licencia. Ayer mismo, una excavadora empezaba los trabajos de demolición.
Revitalización de la zona
La inminente apertura de Tabacos como sede judicial se tradujo en el interés de «mucha gente» en comprar apartamentos o despachos profesionales en ambas torres. De hecho, ya se produjeron algunas ventas sobre plano y la promotora tiene la intención de levantar ambos inmuebles en tiempo récord. Primero construirán el edificio más próximo a la Casa del Mar. Cuando esté ya esté concluido, comenzarán con el otro.
La promotora Udralar (integrada por San José y Espacio Urbano 2000) inició los trámites para construir los edificios hace más de una década, cuando la compañía Altadis cerró la Fábrica de Tabacos y sacó a subasta parte de sus antiguos terrenos. En el 2005, en pleno bum inmobiliario, Udralar pagó 79,3 millones de euros por los terrenos en los que planea construir los dos edificios.
La puja por las fincas fue feroz, ya que el precio de salida rondaba los 44,5 millones. Los inmuebles iban a tener 82 y 81 apartamentos de entre 66 y 114 metros cuadrados, con un precio de entre 5.500 y 6.000 euros por metro.
Pero el proyecto se estrelló con la crisis económica y la empresa fue solicitando prórrogas de la licencia. La última le fue concedida por el anterior gobierno local coruñés.
El plan general en vigor concede a las dos parcelas 8.800 y 8.900 metros cuadrados de edificabilidad. Según el diseño para el que fue concedida la licencia, tendrían ahora 81 y 82 viviendas, con bajos comerciales y garajes (cuatro sótanos, bajo, entreplanta, seis alturas y un bajo cubierta).