Natividad Raña Martínez: «El abuso de analgésicos favorece la cronificación de la migraña»

Fernando Molezún A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

EDUARDO PEREZ

La médica adjunta del Servicio de Neurología del Chuac estará este martes en el ciclo de «Charlas Saludables» en Afundación

25 feb 2019 . Actualizado a las 09:30 h.

La migraña es una dolencia común que puede llegar a resultar altamente incapacitante para quien la padece. Sobre este tema hablará la doctora Natividad Raña Martínez, especialista en neurología del Chuac, en la conferencia que ofrecerá mañana por la tarde en Afundación, dentro del ciclo de Charlas Saludables que organiza la Xerencia de Xestión Integrada de A Coruña con La Voz de Galicia.

-Solemos meter en el mismo saco a todo tipo de dolores de cabeza...

-Pero hay muchos tipos de cefaleas y hay que distinguirlas. Las migrañas se caracterizan por episodios recurrentes de dolor de cabeza que suele ser unilateral, pulsátil, de intensidad moderada o severa y que se suele asociar a náuseas y vómitos. Al paciente le molestan la luz y los ruidos y empeora con el simple movimiento de la cabeza. Por todo esto quien las padece tiene que estar acostado, quieto, a oscuras... No es solo un dolor de cabeza, es algo más, y puede llegar a ser muy incapacitante.

-¿Cuál es la causa de las migrañas?

-Hay diversas teorías, pero la causa exacta no se conoce. Lo que sí se sabe es que ocurre en pacientes genéticamente predispuestos. Entre el 60 y el 70 % de los pacientes tienen antecedentes familiares. Tiene una hiperexcitabilidad neuronal que hace que ante determinados estímulos se liberen unas sustancias que son las que producen el dolor.

-Es una dolencia bastante común.

-Afecta en España al 12 % de la población, por lo que hay cerca de cinco millones de personas con migraña. Es muy común, pero no es el dolor de cabeza más frecuente. Este sería la cefalea tensional. Lo que pasa es que limita mucho a quien lo padece. Es dos o tres veces más frecuente en mujeres que en hombres, y afecta sobre todo a aquellas que tienen entre 20 y 50 años, es decir, que afecta principalmente a mujeres activas, en edad de trabajar, con hijos...

-¿Cómo manifiesta sus primeros síntomas?

-Aparece sin previo aviso y a cualquier edad, incluso en la infancia, aunque sea menos frecuente. Lo que pasa es que no se diagnostica en el primer dolor de cabeza, tienen que ser episodios recurrentes, al menos cinco episodios con las características de la migraña. Y un 20 % de los pacientes presentan otros síntomas asociados como alteraciones visuales, auditivas o del lenguaje.

-¿Qué frecuencia suelen tener las crisis?

-El número de crisis varía de unos pacientes a otros, pero hablamos de migraña crónica cuando se registran al menos quince días de cefalea al mes, de los cuales ocho cumplen los criterios de la migraña. Esta migraña crónica afecta al 2 o 3 % de la población. Y el problema principal es que hay un porcentaje elevado de pacientes, se cree que hasta el 40 %, que está sin diagnosticar.

-¿Por qué hay tanta gente sin diagnosticar?

-Es un diagnóstico puramente clínico, se hace por las características de la cefalea. No hay un marcador biológico ni radiológico que nos confirme que es migraña. Hay muchos pacientes sin diagnosticar porque no acuden a la consulta y lo que es peor, estos se terminan automedicando para paliar el dolor.

-Se abusa de los analgésicos sin receta.

-Y eso favorece la cronificación de la migraña. Habría que acudir a un tratamiento preventivo para no llegar a ese extremo, pero estos no siempre se usan en buena parte porque si no se acude a consulta no se le pueden recetar al paciente. 

«El estrés es el principal desencadenante de estas cefaleas»

A pesar de tratarse de una enfermedad crónica sin cura, sí existen tratamientos y pautas para disminuir las crisis de migraña, como apunta la doctora Raña.

-¿Cuáles son los factores que pueden desencadenar una crisis?

-El principal factor es el estrés. Está presente hasta en un 70 % de los casos. Pero también son importantes los factores hormonales en las mujeres. También influyen los cambios en el ritmo del sueño, tanto dormir de más como de menos, y la alteración de las rutinas diarias. Y también hay pacientes en los que puede influir la dieta, que relacionan el consumo del alcohol o de alimentos como el chocolate o los cítricos a la aparición de crisis. Pero esto no le ocurre a todos. No hay una dieta específica para el paciente migrañoso.

-¿Cómo se tratan las migrañas?

-Hay tres tipos de tratamiento. Uno son las medidas higiénico-dietéticas para evitar desencadenantes conocidos, otro es el tratamiento agudo para las crisis, y el preventivo, que se dirige a disminuir el número de crisis y que estas sean menos intensas. Este tratamiento preventivo se aconseja cuando el paciente tiene crisis muy incapacitantes o cuando tiene que tomar analgésicos más de cuatro o cinco veces al mes, porque podría terminar aumentando la frecuencia.

-¿Cómo funciona el tratamiento preventivo?

-Hay que decir que está infrautilizado, y además la adhesión del paciente al tratamiento es baja, porque no curan la migraña. Sí disminuyen la frecuencia y la intensidad, pero no la curan porque la migraña es una enfermedad crónica incurable. Además no tienen la misma eficacia en todos los pacientes y pueden tardar uno o dos meses en hacer efecto. Y esto hace que algunos pacientes abandonen el tratamiento.