También Samuel era latino

Sandra Faginas Souto
Sandra Faginas CRÓNICAS CORUÑESAS

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

Siempre son los de fuera los que traen el mal aunque el veneno nos salga por la boca

23 jul 2021 . Actualizado a las 05:00 h.

A toda esa gente que se dio prisa en identificar con la marca de la raza a los asesinos de Samuel no hay que tenerla en cuenta nunca. Son los que enseguida se lanzaron a hacer correr por la ciudad que los matones que habían golpeado brutalmente al joven era «latinos». Una señal que en boca de esa gente no tiene más intención que ahondar en la xenofobia que tanto nos va. Queremos ver a los otros, a los inmigrantes y a los extranjeros, con el odio con el que no queremos vernos a nosotros mismos. Siempre son los de fuera los que traen el mal aunque el veneno nos salga por la boca. Y con ese discurso xenófobo parece que algunos descargan la conciencia para no asumir ningún tipo de implicación en lo que en realidad nos afecta a todos.

No sé si los asesinos de Samuel son latinos o coruñeses de pura cepa, lo que sí sé es que el que era de origen latino era Samuel, él sí tenía raíces brasileñas, pero de ese latinismo muchos no quieren hacer mención porque, entonces, tendrían que tragarse todo el odio que quieren usar para distinguirnos. No importa de dónde vengamos ni quiénes sean nuestros padres ni si tenemos más o menos pedigrí cuando de lo que se trata es de salvarle la vida a un ser humano. La lección la han dado magistralmente Ibrahima y Magatte, «esos negros» que a algunos aún les causan desazón son los que ampararon, con su propio cuerpo, los golpes que iban dirigidos a Samuel. Los senegaleses, los simpapeles, los que no tienen marca de la casa han sido los valientes que ayudaron al chico de origen latino que fue apaleado en una calle de nuestra ciudad. A ellos es a quienes deberíamos destacar y estar agradecidos, ellos se merecen nuestro apoyo y nuestro reconocimiento como coruñeses. En esa integración natural que nos honra, Coruña los abraza para siempre.