Paro en la refinería Repsol de A Coruña por la muerte de Unai Martínez

A. M. A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Los sindicatos piden una investigación rigurosa sobre el escape de gas letal que se produjo cuando dos operarios de una empresa auxiliar realizaban labores de mantenimiento durante la parada programada

30 mar 2022 . Actualizado a las 09:23 h.

Los trabajadores de la refinería de Repsol y de las compañías auxiliares no acudirán hoy a sus puestos de trabajo tras la muerte ayer en el Chuac del operario de 35 años Unai Martínez, víctima de un accidente ocurrido el sábado cuando realizaba labores de mantenimiento junto a un compañero y por causas que Repsol investiga inhalaron un gas letal.

Enfundados en monos azules y protegidos con cascos, cerca de medio millar de trabajadores de empresas que prestan servicios en la parada programada de la planta se concentraron ayer para mostrar su solidaridad y exigir una investigación a fondo.

Los sindicatos piden que se depuren responsabilidades y se investigue «con rigor las condiciones en las que se produjo el accidente», señaló el secretario de la Federación de Industria de CC.OO. de Galicia, Víctor Ledo, que instó a Repsol a «ser más estricto en las políticas de subcontratación, sustentadas en la precariedad», para asegurar que los trabajadores de las auxiliares cuenten con la formación y experiencia necesarias.

En esa línea se manifestó Arturo Julián, secretario comarcal de CC.OO., que advirtió que una vez se esclarezca el suceso, el sindicato se personará como denunciante, si procede. «Es necesario que los trabajadores que van a desarrollar trabajos en polos petroquímicos tengan una formación total», aseveró. También la CIG anunció que se personará en la causa para que las «razóns do accidente e o proceso de investigación aberto non queden a medias».

Por su parte, el delegado sindical de Nervión Industries demandó transparencia: «Non lle estamos botando a culpa a Repsol nin a Nervión, pero queremos saber a verdade».

En la concentración se encontraba José, testigo del accidente. «Sentí una explosión, salió humo blanco y los vi caer. Mi reacción fue ir a ayudarlos, pero me picaban los ojos y la nariz y tuve que apartarme. Pedí ayuda y llegaron rápido», explicó en el programa Voces de A Coruña, de Radio Voz.

En la concentración de la tarde, en la que se acordó el paro de hoy, se vivieron momentos de tensión. Trabajadores de las subcontratadas se enfrentaron a los representantes sindicales acusándolos de «inacción». Entre gritos, criticaban que nunca se habían preocupado por su precariedad laboral, y que «ahora, con un muerto, aparecéis con una pancarta para salir en la foto».

Unai Martínez, miembro de una peña deportivista e hijo de un histórico de la planta

Unai Martínez tenía 35 años, estaba casado y era muy apreciado en la planta de Meicende. Aunque trabajaba en la refinería de manera intermitente en la compañía Nervión Industries, una de las subcontratas de Repsol, toda la plantilla de la petrolera y las auxiliares lo conocía porque su padre era uno de los históricos de la fábrica.

También el deportivismo llora su muerte. Aficionado al Básquet Coruña y al Liceo de hockey, pero sobre todo al fútbol, era miembro de la peña Cheka, a la que ayer transmitieron su pésame decenas de aficionados a través de las redes sociales.

El accidente en el que perdió la vida, un escape «controlado y aislado», según informó el 112, tuvo lugar a las 11.20 horas del sábado. Unai y otro operario realizaban labores de mantenimiento en un rack de tuberías de la planta de hidrotratamiento cuando inhalaron «restos de gas residual» que, según un trabajador que se encontraba a pocos metros, podría ser ácido sulfhídrico. El compañero se recuperó casi al instante, pero Unai tuvo que ser reanimado y estabilizado en la refinería antes de ser trasladado al hospital en ambulancia medicalizada. La compañía ha abierto una investigación para aclarar las causas del accidente.