La familia de Diego Bello pedirá la prohibición de abandonar el país para los policías acusados de su asesinato
A CORUÑA
Los familiares del surfista, abatido a tiros en enero del 2020, también solicitarán esta semana el traslado del expediente judicial a la capital de Filipinas con el objetivo de impulsar la celebración del juicio
05 oct 2022 . Actualizado a las 13:23 h.Los familiares de Diego Bello, el coruñés abatido a tiros en Siargao, Filipinas, presuntamente a manos de la Policía Nacional de ese país en enero del 2020, avanza en un comunicado acciones con las que pretenden dar un nuevo impulso al procedimiento «y conseguir que se celebre, por fin, el ansiado juicio para el esclarecimiento de los hechos».
La próxima semana los abogados del caso pedirán ante el tribunal una orden de prohibición de abandonar el país para los tres policías acusados de ser los responsables del asesinato del coruñés, «pudiendo esta medida complementarse con el lanzamiento de una alerta a la Interpol». El entorno del joven se muestra sorprendido de que a pesar del cambio de gobierno filipino, hasta el momento no se haya detenido a los acusados. «Recordemos que se les concedió una suspensión de empleo, pero con sueldo desde el momento en que se conoció su imputación, ya que mantienen activas sus redes sociales y la gente de la isla es conocedora del paradero de los policías», indican. Así, critican la imagen que traslada el gobierno filipino «de total impunidad frente a los presuntos asesinos del coruñés» y exigen que los policías sean detenidos «y trasladados a prisión pues, de los cargos que se les imputan, deben de permanecer en prisión provisional hasta la celebración del juicio».
Asimismo, esta semana los abogados de la familia presentarán ante el juzgado que tramita el procedimiento en Surigao del Norte la solicitud de traslado del expediente judicial a la capital de Filipinas, Manila. La solicitud será entregada personalmente por los letrados «con el único fin de evitar posibles presiones sobre el juez que debe de resolver el procedimiento, y que el caso sea llevado a la capital al tratarse de un asunto de suma importancia y con una gran relevancia internacional».
En los próximos días también está previsto que se produzca una reunión con los responsables de los bancos donde la víctima tenía sus fondos «y así, poder liberarlos cuanto antes, tras más de dos años de continuas trabas administrativas y burocráticas». La familia espera así poder «cerrar una página más de este desagradable suceso y centrar todos sus esfuerzos únicamente en el juicio».
