Una decena de personas mayores mueren solas en su casa cada año en A Coruña

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

Hay un total de 28.305 hogares compuestos solo por un jubilado

28 oct 2022 . Actualizado a las 10:39 h.

Murió sin nadie a su lado. Al igual que el pasado martes en Vioño, la mujer que este miércoles apareció muerta en su casa de la calle Colombia, vivía sola y sola se fue. Un nuevo caso de persona mayor que fallece y durante unos días nadie lo sabe. Al igual que el martes, fue un familiar el que dio la voz de alarma, avisando de que hacía días que no sabían nada de la mujer, de avanzada edad, y no abría la puerta de su vivienda. Los bomberos fueron los encargados de facilitar el acceso a la Policía Nacional. 

En estos dos últimos casos, las fallecidas tenían allegados que estaban pendientes de sus necesidades, y por eso no se tardó en descubrir los cuerpos. Pero hubo casos que ponen los pelos de punta. Personas que llegaron a aparecer momificadas, como aquel hombre que llevaba meses fallecido en Cambre, en julio del 2017. Ancianos sin nadie que los asistiese o sin interés de que los asistieran que en lugar de salir en una esquela lo hicieron en una nota en la página de sucesos.

Las autoridades, como las entidades sociales, como la Cruz Roja, llevan años trabajando con personas mayores que residen solas. Según el Instituto Nacional de Estadística, en A Coruña hay 28.300 hombres y mujeres mayores de 65 en esa situación. Muchos de ellos, dependiendo únicamente de sí mismos, sin familia o amigos cercanos que se ocupen de sus necesidades más básicas. Y ahí está la Cruz Roja. Ahí está Padre Rubinos. Ahí están la concejalía de Benestar Social y otras instituciones que se ocupan de tapar esos huecos, ya sea con teleasistencia, visitas programadas o acompañamientos.

«La población envejece y la calidad de vida de las personas mayores es mejor y muchas prefieren estar solas que en una residencia. Pero los recursos no siempre son suficientes. Nunca ha pasado tantas veces. Cada año es peor. Cada año mueren más ancianos en la soledad del hogar», explica un miembro del Instituto de Medicina Legal de Galicia.

En A Coruña se produce una media de diez fallecimientos al año de personas mayores de 65 años que viven solas. Y los meses de invierno es cuando más hay, destaca el gerontólogo Antonio Pazos. «Las bajas temperaturas hacen aflorar enfermedades que no son capaces de superar. Hay que tener en cuenta que a ciertas edades siempre se padecen dolencias que un simple catarro las empeora», añade. 

La situación económica

Elena Rey es voluntaria de la Cruz Roja y conoce decenas de casos. Se ha encontrado de todo. Su experiencia le dice que hay gente que vive sola porque quiere, porque se siente independiente y no asume compartir vida con nadie ni permite la ayuda de un tercero. Otros viven sin compañía, cuenta la joven, porque toda su familia falleció y carecen de recursos para sufragar una residencia. «El dinero es un factor muy a tener en cuenta en la situación de las personas con cierta edad», explica. Habla de quien «está anclado en la soledad porque su pensión no alcanza para una residencia ni siquiera subvencionada». O que tiene ingresos pero ha de ayudar a sus hijos. O incluso se dan casos de personas que por su alta prestación no puede acceder a un asilo por superar el límite salarial y, a la vez, tampoco pueden alcanzar a pagar las cantidades que piden en las residencias privadas. Al respecto, recordar que el precio medio (calculado de forma ponderada por tipo de habitación) de una residencia de ancianos privada en Galicia es de 2.000 euros mensuales.

Las estadísticas ponen de manifiesto que los hogares unipersonales en A Coruña tienen cara de mujer, de nacionalidad española, viuda y mayor de los 85 años.

Ayudas a domicilio, acompañamiento o pulseras inteligentes

No hace muchos años, la asistencia a las personas mayores que vivían solas era prácticamente anecdótica más allá de los esfuerzos que podían hacer las diferentes entidades. Hoy, es un problema tan serio que las ayudas están presentes en la mente de los políticos y de los responsables de las distintas entidades públicas o privadas.

Así, la concejalía de Benestar Social puso en marcha al principio del mandato un plan dirigido exclusivamente a las personas mayores que viven solas. Y ya se dieron los primeros pasos. Para ello se hizo un censo de personas mayores de 80 años y ese programa incluirá teleasistencia gratuita y un seguimiento continuo. Pero tan importante como eso, «los técnicos trabajan para ofrecerles todo el abanico de actividades municipales». El esfuerzo va por ahí, para que tengan relaciones, que vivan, que no se encierren, decía la edila de Igualdade, Benestar Social e Participación, Yoya Neira. 

La Cruz Roja

Desde acompañamiento a viviendas tuteladas. El nuevo plan de mejora en teleasistencia avanzada que Xunta y la Cruz Roja pusieron en marcha alcanza ya a todos los coruñeses que lo soliciten. «Implementamos novos dispositivos como reloxos de pulseira intelixentes e smartphones de pantalla táctil co obxectivo de mellorar a vida dos máis maiores», dicen desde la Cruz Roja de Galicia. Además, la entidad cuenta con otra serie de asistencias, como la ayuda a domicilio básica o complementaria, transporte adaptado, centros de día o servicios de estancias diurnas, apoyo a los familiares y cuidadores o viviendas tuteladas.