Marta Capelán: «El cáncer genera mucho temor, que solo se evita con información y confianza»

El próximo domingo se celebra el Día Mundial contra el Cáncer, una jornada destinada a fomentar la prevención y sensibilización sobre esta enfermedad de la que todavía queda mucho camino por recorrer tanto en investigación como en tratamiento, incluyendo aquí algo tan importante como es la atención al paciente desde las más diversas perspectivas. La oncóloga especialista en cáncer de mama y experta en oncología integrativa Marta Capelán (A Coruña, 1978) abrió hace menos de un año en A Zapateira su clínica.

—¿Qué es la oncología integrativa?

—Es un área del tratamiento del cáncer que se centra en el paciente, en sus necesidades más vitales, empleando técnicas complementarias que han demostrado sus beneficios. Siempre en conjunción con el tratamiento oncológico convencional, claro. Se mejora enormemente la calidad de vida, se amortiguan los efectos secundarios, la sintomatología. Y todo a través de convertir al paciente en participante activo de su bienestar durante todo el proceso oncológico.

—No es un tratamiento alternativo, sino complementario.

—Exacto, es muy importante que quede claro que es una suma. Se trata de complementar, ayudar, nunca restar. Ante todo soy oncóloga y cada vez que viene una paciente a verme y me dice que no quiere tomar el tratamiento convencional —quimio, radio, inmunoterapia, tratamiento hormonal, cirugía...— tengo que intentar convencerla de las evidencias científicas. Eso es lo que permite que los pacientes vivan más. El resto de técnicas complementarias, de la mano siempre del tratamiento oncológico, lo que pueden hacer es ayudar a vivir mejor.

—Esas técnicas, ¿están también avaladas científicamente?

—Hay evidencia científica que las respalda. No es algo que venga de ahora. En la década de los ochenta, en Estados Unidos, ya se hablaba de medicina integrativa. Hay cosas que están ya muy integradas en nuestra sociedad y que nadie duda sobre sus beneficios, pero cuando empecé a hacer yoga, a los 21 años, en la facultad de Medicina de Santiago me preguntaban si estaba en una secta. Es una cuestión de sentido común, todo está interrelacionado.

—¿Cuáles son las bases de la oncología integrativa?

—Se basa en tres pilares fundamentales. En primer lugar están los cambios en el estilo de vida: alimentación, ejercicio, descanso y manejo del estrés. En segundo lugar hablaríamos de las técnicas cuerpo-mente, porque son cosas que están muy unidas. Ahí entraría la práctica de yoga, meditación, acupuntura... Y el tercer pilar es la suplementación. Y ojo con esto, que puede haber interacciones con los tratamientos, pueden alterar sus efectos. Así que tiene que haber siempre supervisión médica.

—Habla de descanso y control del estrés. Parece incompatible con que te digan que tienes cáncer.

—Como decía Darwin, los humanos no son los más fuertes o los más inteligentes, sino los que mejor se adaptan. El problema es que muchos pacientes desconocen las herramientas que existen para manejar esa situación de estrés o de desánimo que puede acompañar al diagnóstico de un cáncer. En el proceso del cáncer hay mucha incertidumbre y temor que solo se evita con información y confianza. Información útil, que responda dudas después de haber escuchado las inquietudes del paciente.

—Y menciona la prevención.

—En el 2020 había 20 millones de casos de cáncer en el mundo, y en el 2040 se estima que llegará a haber 30 millones. Un aumento del 50 %, de ahí la importancia de la prevención. Es cierto que la mayoría de los estudios sobre oncología integrativa están centrados en la calidad de vida, el manejo de síntomas como náuseas, vómitos, fatiga... Pero los hay que demuestran, por ejemplo, que personas que realizan habitualmente ejercicio aeróbico tienen menos posibilidades de desarrollar metástasis. Hasta la mitad de los tumores se podrían evitar con un estilo de vida adecuado. Pero cuando hablamos de cáncer generalizar nunca es bueno, hay que hablar de cada caso, de cada diagnóstico.

«La comunidad es fundamental, muchos pacientes no se sienten comprendidos»

La doctora Marta Capelán ha desarrollado su vida profesional en algunos de los más destacados hospitales, como el Royal Marsden de Londres, el Instituto Jules Bordet de Bruselas o el Vall d'Hebron de Barcelona; y se especializó en oncología integrativa en el Memorial Sloan Kettering Cancer Center en Nueva York y en el Centro de Mind-Body Medicine en Washington.

—Parece que la oncología integrativa está más desarrollada fuera de España.

—En 1997 el National Cancer Institute de Estados Unidos creó su departamento de técnicas complementarias. En el 2003 se fundó la Sociedad de Oncología Integrativa, y 15 años después hicieron la primera publicación científica conjunta con la Sociedad Americana de Oncología. Hasta el Parlamento Europeo ha resaltado la importancia de la medicina integrativa. Y aquí hace ya años que se está utilizando el yoga. Por ejemplo, cuando llegué al Vall d'Hebron en el 2017 ya se hacían charlas y se hablaba de algo tan fundamental como la sexualidad con las pacientes de cáncer de mama. Se contemplaba el cáncer desde distintas perspectivas. Y cada vez vemos cómo se van integrando cuestiones relacionadas con el ejercicio o la alimentación en más centros de España.

—Ha desarrollado un método que denomina ADN Reset.

—El nombre es un acrónimo. Alimentación. Descanso, Naturaleza, Relajación, Ejercicio, Suplementación, Emociones, y Tribu.

—Llama la atención lo de tribu...

—Es que la comunidad es fundamental. Muchos pacientes no se sienten comprendidos ni por su familia y necesitan un vínculo. Me he encontrado a muchas mujeres que han estado toda la vida pendientes de otros y que se han olvidado de sí mismas.

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