El histórico narcopiso coruñés de Monelos ya suma cinco redadas en cuatro años

alberto mahía A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

MARCOS MÍGUEZ

Agentes con perros acudieron de nuevo a este punto de venta de droga

14 mar 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

No es que la policía haya vuelto a la calle Vicente Aleixandre, es que nunca se ha ido. Siempre está. El grupo que lucha contra el narcotráfico no le quita ojo al número 4 de esa vía. Vigila quién entra y quién sale durante semanas y cuando reúne las pruebas para llevar ante el juez, con una periodicidad de ocho meses, se hace una redada. La última, ayer. Desde marzo del 2020, esa vivienda del número 4 ya se registró cinco veces.

En el operativo de ayer participaron una decena de agentes apoyados por la unidad canina. Fue sobre el mediodía y por el momento se desconoce si se produjeron detenciones o si se halló droga. Nada trascendió al estar el asunto bajo secreto de sumario.

La brigada provincial de Policía Judicial, Unidad de Drogas y Crimen Organizado fotografiaron en los últimos meses a decenas de toxicómanos saliendo del portal. Comprobaron, además, que aparte de la venta de cocaína y heroína en el piso, un joven utilizaba un patinete eléctrico para repartir papelinas allí donde fuese requerido.

En la calle Vicente Aleixandre, en el corazón de Monelos y a escasos cien metros del instituto, un operativo policial a nadie coge por sorpresa. Se vende droga «desde siempre». Cuando los agentes se van, regresa la calma unas semanas y de nuevo vuelven a las andadas. Para desesperación de los vecinos. Ya no solo denuncian el goteo incesante de toxicómanos entrando y saliendo, sino también el continuo aumento de criminalidad que ello provoca en la zona.

Cuando Manuel era pequeño —tiene 56 años— en las calles Camino de la Iglesia y Vicente Aleixandre ya se vendía droga. Dos terceras partes del trapicheo de heroína en la ciudad se concentraban en Penamoa y casi el resto, en algunos pisos de esas vías. El día que nació este vecino de la zona abrió las puertas el instituto de Monelos, por lo que «esa lacra y la educación convivieron toda la vida una pegada a la otra». A lo largo de ese medio siglo de existencia de lo peor y lo mejor, de la droga y de los libros de texto, se intentó varias veces por parte de los vecinos y de las autoridades académicas eliminar ese foco. No se pudo. Tanto los pisos donde se vende como las casas ruinosas donde se consume estuvieron ahí desde siempre, denuncian. Otro residente de la zona destaca que el número de traficantes en el barrio no es el de los ochenta y noventa. Ahora se concentra en «un par de narcopisos».

Uno de ellos, donde ayer se produjo la redada, salió en los telediarios de toda España el 25 de noviembre del 2018. Espectadores y lectores giraron todos la vista hacia la calle Vicente Aleixandre en el barrio coruñés de Monelos porque frente a uno de sus portales se concentraron familiares y amigos de un joven de 21 años que había fallecido por sobredosis tras comprar heroína en esa vivienda. «Llevamos toda la vida viendo la misma escena. A todas horas, toxicómanos saliendo de ese piso y caminando hacia el picadero, mezclándose entre los alumnos del instituto», cuenta otro vecino.