El relevo generacional: el verdadero desafío del éxito empresarial

Berta Rivera A CORUÑA

A CORUÑA

Locales vacíos en A Coruña
Locales vacíos en A Coruña ANGEL MANSO

Berta Rivera, directora de la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidade da Coruña, analiza los desafíos de estas sociedades

20 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

El complejo panorama empresarial actual está marcado por grandes retos como la incertidumbre económica y geopolítica, una rápida transformación digital, la sostenibilidad, y la gestión del talento, entre otros. No obstante, uno de los mayores desafíos estratégicos, que afecta de forma directa a la viabilidad empresarial a largo plazo, es el relevo generacional. Casos paradigmáticos como el de General Electric o Apple en el período posterior a Steve Jobs, evidencian como la elección del líder, o la ausencia de una estrategia sucesoria, pueden determinar el futuro de una organización.

La cuestión de la sucesión es particularmente crítica en las empresas familiares, con vocación de permanencia en el tiempo, y, por lo tanto, de transmisión a las siguientes generaciones. Los datos son reveladores: se estima que el porcentaje de empresas familiares que consiguen llegar a la segunda generación se sitúa entre el 30 y el 33%, entre el 10 y el 15% a la tercera y entre el 3 y 5% a la cuarta.

¿A qué se debe, entonces, esta paradoja entre el deseo de continuidad y la elevada tasa de fracaso sucesorio? Este desafío, que afecta a empresas de todos los tamaños y sectores, no se limita a un cambio de liderazgo, sino una compleja combinación de factores demográficos, culturales y económicos. La ausencia de una planificación estratégica temprana obstaculiza la preparación de los futuros líderes y la definición de un proceso de transición claro. La resistencia del líder actual a delegar, a menudo ligada a su fuerte vínculo personal con la empresa, puede retrasar o complicar el proceso. Igualmente, las complejas dinámicas familiares y las diferencias generacionales en expectativas y valores dificultan la retención de talento joven en estructuras tradicionales.

Los efectos de una gestión inadecuada del relevo generacional son considerables. La pérdida de conocimiento, la interrupción operativa, la disminución de la innovación y la pérdida de competitividad son algunas de las posibles consecuencias. En un contexto globalizado, donde la agilidad y la capacidad de adaptación son esenciales, las empresas que no logren renovar su liderazgo y asegurar una transición fluida entre generaciones se encontrarán en clara desventaja competitiva

Berta Rivera

Directora de la Cátedra de Empresa Familiar de la Universidade da Coruña