La gestora de Galivivienda se aviene a bajar las cuotas de Xuxán y el ICO pide concreción

La Voz A CORUÑA / LA VOZ

A CORUÑA

Cooperativistas, en la asamblea del 12 de mayo en A Coruña
Cooperativistas, en la asamblea del 12 de mayo en A Coruña EDUARDO PEREZ

El instituto público de crédito destaca «la voluntad de las partes» de avanzar en la financiación de los pisos de alquiler

21 may 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La evidencia de que «se está trabajando» y que «es voluntad de las dos partes» llegar a un acuerdo para la financiación de 224 pisos de alquiler social en Xuxán parece casi el único avance de la reunión que ayer mantuvieron los gestores de la cooperativa Galivivienda que promueve los edificios con técnicos del Instituto de Crédito Oficial (ICO).

Casi, porque después del encuentro, a cuyo resultado fiaron las familias cualquier decisión económica, el portavoz de los gestores, Rafael Román, se mostró dispuesto a modificar el punto que bloqueó el diálogo —de por sí difícil—, en el seno de la cooperativa y que más preocupación causó a los socios: un horizonte de 10 años para aportar el capital, frente a los 36 que se manejaban hasta entonces, y que en la práctica dispararía hasta 1.000 euros el desembolso mensual.

«Previsión y exigencia son dos cosas distintas. Una cosa es que yo pueda irme a Australia y otra muy distinta la posibilidad de que yo me vaya a Australia. En contactos anteriores el ICO puso 10 años, como condición de solvencia; nosotros lo llevamos a la asamblea, en un ejercicio de transparencia, y ahí se lio todo. Ahora hay que seguir trabajando», ilustró Román después de señalar que «la reunión no podía haber ido mejor».

«El plan económico es viable y el ICO quiere financiarlo. Ellos están interesados, sin dejar de considerar que funcionan como un banco, necesitan garantías de que se les va a devolver el dinero, y de ahí, los requisitos de solvencia», que en el caso de la empresa elegida para la obra del cuarto edificio no sería suficiente, añadió.

Lejos de hablar de acuerdos, el ICO enmarca la reunión de ayer en «la operativa habitual de trabajo, como entidad financiera, para avanzar en el análisis de la solicitud de financiación». Afirma que «no se ha aprobado la operación, ni están cerrados los términos y condiciones de la posible financiación», e incide en que se está trabajando para alcanzar el mejor escenario posible, pero aún hay aspectos de operación que han de concretarse por parte de la gestora para poder finalizar la fase de análisis de forma satisfactoria».

Rafael Román admitió que la cooperativa tiene que enviar al instituto público documentación pendiente, como la licencia y la adjudicación del inmueble de 14 viviendas cuya tramitación está pendiente de un informe de Patrimonio. Sobre los tres bloques ya adjudicados a Copasa y San José, no ha precisado fecha para el comienzo de los trabajos.

«En caso de que esta fase finalice de forma favorable, lo que es la voluntad de todas las partes, en las próximas semanas continuaría su trámite para aprobación», anotaron fuentes del ICO a través de la Delegación del Gobierno. 

Asamblea, cuándo

Los plazos están abiertos. «Esta tarde [por ayer] enviaremos un comunicado a los cooperativistas informándoles del resultado y cuando tengamos todo cerrado convocaremos la asamblea. Antes no tiene sentido», defendió el abogado, que podría mantener la propuesta de los 14.000 euros antes de la entrega de las llaves, y 49.000 en 36 años a razón de 113-115 euros al mes.

Sobre la ayuda de 10 millones de euros procedentes de fondos europeos que la cooperativa recibirá con la condición (inviable ya) de que la obra termine antes del 30 de junio del 2026, Rafael Román añadió que son «el Ministerio de Vivienda y la Xunta los que están trabajando para encontrar una solución para un problema que tiene toda España, sea una prórroga de la Unión Europea o la suspensión de la obligatoriedad de devolver la subvención».