Cambre negocia con las propietarias destinarla al ocio y la cultura
14 may 2023 . Actualizado a las 17:38 h.La sala de fiestas El Seijal está a punto de reabrir sus puertas a los bailes. La mítica discoteca que concitó miles de encuentros durante varias décadas del siglo pasado acaba de asomar como una de las propuestas estrella del alcalde de Cambre, Óscar García Patiño, quien espera recuperar la sala de fiestas. Así lo anunció durante la presentación de la candidatura de Unión por Cambre (UxC). «O Concello precisa dun espazo que permita a realización de eventos cunha capacidade superior ás 500 persoas e que complemente o futuro salón de actos de Cambre e, ese lugar, vai ser a antiga sala de festas», explicó el alcalde. No obstante, la iniciativa parte de la propiedad del recinto, que lo puso a disposición del Concello para fomentar los bailes de mayores, pero también los numerosos grupos locales.
De este modo, para darle una nueva vida a la sala, se propone elaborar una programación completa de eventos musicales y culturales como, por ejemplo, obras de teatro, espectáculos y conciertos.
La versatilidad de esta instalación posibilitaría su uso también para acoger bailes. La idea es celebrar los de los mayores en esta dependencia, una novedad que irá de la mano de un servicio de transporte municipal que estará disponible para todas las parroquias de Cambre.
En la actualidad, el local se encuentra en buenas condiciones. De esta forma, para abrirlo tan solo sería necesaria una pequeña mejora de la iluminación y la instalación de servicios adaptados para personas con movilidad reducida.
Raphael volvió loca la sala en 1967
Hubo muchos nombres. Lo mejor de lo mejor de la música del momento. Por El Seijal pasaron Los Brincos, Raffaela Carrá, el Dúo Dinámico, Nino Bravo, Lluís Aguilé, Pucho Boedo o Joan Manuel Serrat. La sala mantiene el halo de museo, con carátulas, discos y el eco de risas y acordes de miles de asistentes de toda la comarca. Son muchas las fechas que marcan la biografía de este recinto fundado por Manuel Lafuente Brañas en 1929 con el nombre de Salón de Baile Xuanon, para ser rebautizado como El Seijal durante la posguerra debido al mármol blanco del suelo. Uno de los años cincelados en oro fue el de 1967. Antes de que el hombre llegara a la Luna, Raphael pisó esta sala de fiestas para júbilo y regocijo de asistentes de toda la comarca. El cantante de Linares ya había disparado su fama gracias a su participación en los festivales de Benidorm y Eurovisión. Aquel día fue capturado por la cámara del fotógrafo Alberto Martí Villardefrancos. La sala de fiestas, que llegó a tener un plantilla de cuarenta personas, se fue adaptando a los tiempos con periódicas reformas, como en 1978, cuando se taparon los ventanales y se instaló un equipo de luminotecnia. El declive se inició a finales de la década de los ochenta. La sala comenzó a notar que sus clientes se marchaban a las nuevas y modernas discotecas de A Coruña. De este modo, se fueron espaciando en el tiempo las aperturas de la sala para eventos muy concretos, como fiestas de Nochevieja, grabaciones de películas o fiestas particulares, como la celebrada por la compañía Zara Home con motivo de su décimo aniversario.