La subdelegada del Gobierno visitó la zona en la que el Gobierno central invirtió 1,4 millones
03 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Las obras de regeneración de la playa Grande de Miño están a piques de finalizar y la subdelegada del Gobierno en A Coruña, María Rivas, visitó este martes la zona coincidiendo con el inicio de la temporada de verano. Junto con el alcalde, Manuel Vázquez Faraldo, supervisaron el estado de la recuperación del espacio dunar y las marismas, en las que el Gobierno central, a través del Ministerio de Transición Ecológica, invirtió 1.375.028,27 euros.
Rivas recordó que la actuación responde a las peticiones del Concello para revalorizar un arenal emblemático para el municipio. Destacó que el objetivo es «facer compatible o uso da cidadanía e dos turistas coa protección ambiental».
María Rivas, que estuvo acompañada por el jefe de la Demarcación de Costas en funciones, Carlos Gil, y miembros de la corporación, visitó la zona de dunas donde se retiraron las plantas invasoras y especies alóctonas.
Este proyecto de regeneración supuso la instalación de medidas de protección delimitando las zonas protegidas con madera y cuerda para impactar lo menos posible en el paisaje, además de la sustitución de la pasarela de madera por otra de un material más acorde con el entorno y más fácil de mantener. La subdelegada recordó que se ha recuperado la zona de marismas, ocupada durante años por un campo de fútbol, y el medio natural mediante la corrección de impactos y la reordenación de los usos. Lo que se busca es «protexer este espazo natural e recuperar esa zona das marismas para mellorar a calidade de vida dos veciños e veciñas do municipio» y que con esta actuaciones recupera un gran activo para o turismo y para el disfrute de los vecinos.
El alcalde de Miño, Manuel Vázquez Faraldo, agradeció al Gobierno de España «por manter o seu compromiso con Miño e chegar a tempo para a temporada de verán», al tiempo que incidió en la «importancia que ten esta recuperación ambiental para o espazo dunar e a marisma, tanto a nivel de conservación e coidado medioambiental como para o uso e desfrute do areal por parte de veciñanza e turistas».