Gómez Yebra se acerca a la ciencia ficción en una obra «escrita con más temple» que la de Dan Brown
26 ene 2008 . Actualizado a las 02:00 h.Es profesor de Matemáticas en secundaria, nació en Sarria, pero en su adolescencia se trasladó con sus padres a Andalucía, donde hoy reside. Miguel Gómez Yebra ha publicado varios obras de ciencia ficción y de poesía, y acaba de sacar a la venta La clepsidra de Neptuno, (Ediciones Irreverentes), 600 páginas llenas de intriga, ciencia, fantasía, tramas cruzadas e increíbles descubrimientos.
-¿Qué pretende contar?
-La historia de personas de nuestro días, cuyo protagonista se ve metido en una intriga que roza la novela histórica, al ser requerido por su novia, profesora de un instituto, para que intente descubrir a los autores de una pintada injuriosa que han hecho contra ella en los servicios del instituto donde trabaja. La base de toda la intriga son claves de tipo científico, en la suposición de que las entidades pitagóricas no desaparecieron, sino que pervivieron como sectas secretas y, tras un cisma, consiguen salir del planeta para seguir sus investigaciones.
-¿Qué le aporta al lector, simplemente entretenimiento?
-Le aporta una reflexión sobre el modelo de sociedad que tenemos y las posibles alternativas a las existentes. Y también verse reflejados, sobre todo los jóvenes, en los personajes, que son actuales, con los mismos problemas que los de hoy.
-Mezcla intriga, historia y ciencia ficción. ¿Qué tipo de novela es?
-Es una novela de intriga con contenidos científicos. Es verdad que en algunos momentos roza la novela histórica, y la resolución de la intriga, que está abierta a la interpretación del lector, entra en el campo de la ciencia ficción.
-¿Cuál es el punto fuerte de esta obra?
-Me gustaría que se la recordara por las aportaciones desde el punto de vista científico; por la divulgación al gran público de algunas cosas que son novedosas, por innovadoras, y otras, poco conocidas por la gente, como por ejemplo el teorema de Pitágoras en tres dimensiones; con nuevas perspectivas del numerado que se ha visto hasta ahora, y también por el número sidéreo, que es el equivalente en el espacio de las tres dimensiones al número áureo. Espero que destaque por el hecho de elaborar la novela histórica desde una perspectiva completamente distinta. La mayor parte de las novelas históricas tratan de templarios, rosacruces..., es decir, es un campo monotemático. Y aquí nos vemos en una sociedad perfectamente plausible, que se aborda desde una perspectiva más original, la de los pitagóricos y el número como base del misterio.
-¿Hay quien compara su libro con «El código da Vinci»?
-El código da Vinci parece una novela por entregas, y la mía no es así. Está escrita de forma más tradicional y con más temple. Creo que engancha.
-¿A qué cree que se debe el éxito de Dan Brown?
-Quizás, a presentarnos una serie de claves misteriosas de forma que parezcan reales, sin tener mucho fundamento o al menos demostrable. Por su estilo, El código Da Vinci me parece una novela por entregas hace que para un lector no muy acostumbrado a otro tipo de literatura se enganche con facilidad hasta el final.