El premio, que fue entregado por el rey Juan Carlos, reconoce la contribución de los galardonados a la cultura y la lengua españolas.
15 abr 2010 . Actualizado a las 23:21 h.La presidenta filipina, Gloria Macapagal Arroyo, y el escritor peruano, Mario Vargas Llosa, recibieron este jueves de manos del rey Juan Carlos el II Premio Internacional Don Quijote de la Mancha por su contribución a la difusión de la cultura y la lengua españolas.
Ambos recibieron su premio en una sobria ceremonia sin discursos, presidida por los Reyes, Don Juan Carlos y Doña Sofía, en el palacio de la Zarzuela, residencia oficial de la Familia Real española.
«A la presidenta de Filipinas le ha hecho una gran ilusión porque es un reconocimiento a una decisión política importante que ha tomado como dirigente», explicó a los periodistas el presidente regional de Castilla-La Mancha, José María Barreda, cuyo gobierno copatrocina el galardón junto con la Fundación Santillana.
«Siente un gran cariño hacia nuestro idioma y le parece muy importante que se recupere en su país», añadió Barreda, en referencia a la concesión del premio a la presidenta Filipina.
Macapagal fue galardonada por «su impulso a la reintroducción del idioma español en el sistema educativo filipino».
En 1987 Filipinas, ex colonia española, eliminó el español como lengua cooficial y la obligatoriedad de estudiarlo en las escuelas, tras lo cual fue perdiendo terreno en favor del inglés.
Actualmente el español es voluntario en las escuelas y el gobierno quiere extender su enseñanza a partir de 2012.
Barreda también se refirió al otro galardonado, el escritor peruano Vargas Llosa, que fue premiado por su «destacada trayectoria individual» y por «enriquecer el territorio creativo de la lengua española integrando (...) las más destacadas influencias de la literatura universal».
Vargas Llosa es uno de los novelistas «más importantes y que más ha contribuido a universalizar el español y a extender el inmenso territorio cultural de Castilla-La Mancha», afirmó Barreda.
En su primera edición, estos premios, dotados con 25.000 euros (33.866 dólares) y una escultura de Manolo Valdés, fueron concedidos al presidente de Brasil Luiz Inacio Lula Da Silva y al escritor mexicano Carlos Fuentes.