El público del festival participa activamente en los encuentros con los artistas
20 nov 2010 . Actualizado a las 02:00 h.Con un público mayoritariamente universitario y otro que ha madurado a lo largo de los veinticuatro años de existencia de Cineuropa, el festival compostelano alcanza su paso del ecuador con el aforo de sus sesiones blindado, según comentó ayer el director del certamen, José Luis Losa. Unos espectadores «fieles», en su opinión, y «participativos», que no se pierden los Encontros co público de los directores y productores que pasan por el festival, como es el caso del laureado productor español Luis Miñarro, quien agradeció la existencia de festivales como Cineuropa, la única forma de que un cine como el suyo pueda ser visto, gracias a estas auténticas «ventanas o respiraderos», en palabras de Losa.
En el encuentro con este hombre, esencia de la producción cinematográfica española, que tuvo lugar el pasado martes, unas 150 personas participaron en el coloquio, «una señal de que la gente no solo quiere ver cine, sino tener contacto con los directores y productores», comenta el director del certamen. También los jóvenes realizadores emergentes del cine gallego dialogaron con el público, y en los próximos días los espectadores podrán conversar con directores españoles como Jonás Trueba, Manuel Martín y Miguel Ángel Vivas, este último director de Secuestrados , filme que clausurará Cineuropa el 3 de diciembre.
A una semana de la entrega del Premio Cineuropa a la actriz madrileña Pilar López de Ayala por su labor cinematográfica, ya se van perfilando los filmes candidatos al premio del festival, que concede el público, un galardón más bien honorífico, puesto que la gratificación que conlleva es de tan solo 6.000 euros; aspecto este en el que Cineuropa no puede competir con otros certámenes, ya que su presupuesto es de tan solo 300.000 euros. La película Neds , del escocés Peter Mullan, que abrió el festival, encabeza el ránking de votos. Ganador en San Sebastián, este filme refleja con dureza la vida social excluyente en el Glasgow marginal de los años setenta. Le sigue, a tan solo dos décimas de distancia en votos, el filme Submarino , del danés Thomas Vinterberg, realizador iniciado con el célebre Lars von Trier, que ofrece una visión agria de la familia a través de dos hermanas, heridas por traumas del pasado.
Pero en cuanto a premios se refiere, el director del festival está especialmente entusiasmado con el Premio Cineuropa, que el 3 de diciembre recibirá el director franco-gallego Oliver Laxe, la gran revelación del último festival de Cannes al obtener el premio de la crítica por su primer largometraje Todos vós sodes capitáns , que será estrenado en Galicia en el festival compostelano. «Será un acontecimiento -dice Losa-, y como festival nos honra que Oliver haya elegido que la película se vea aquí, pues me consta que tuvo otras ofertas. Su cine, nada fácil y con pocos medios, es el que defendemos aquí».