La princesa de Asturias, que ha inaugurado hoy el VI Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, reclama «rigor y respeto» en el uso del lenguaje.
28 sep 2011 . Actualizado a las 23:18 h.¿Es la palabra una herramienta del poder o un contrapoder? ¿Un arma que se pone al servicio de políticos, terroristas o mafiosos o que los combate? ¿Un agente integrador o segregador de minorías? ¿El periodista la usa con valentía y rigor o se escuda en la corrección política y el eufemismo traicionando la esencia de su oficio? A peguntas cómo estas trata de responder el VI Seminario Internacional de Lengua y Periodismo, que la princesa de Asturias, Letizia Ortiz, ha inauguarado hoy, un gran «chequeo» de los informadores a la salud de su primordial y dúctil herramienta de trabajo. Letizia ha vuelto a aproximarse al oficio que ejerció durante años, antes de contraer matrimonio con el príncipe Felipe, y lo ha hecho reclamando «sentido común, rigor y respeto» en el uso de la palabra en el monasterio riojano de Yuso, cuna del español.
Bajo el lema «El periodismo y el lenguaje políticamente correcto», reúne este seminario a periodistas, académicos, lingüistas y otros profesionales de las dos orillas de un idioma milenario y muy vivo que une a casi 500 millones de personas. Analizan las relaciones entre «la precisión y la corrección» del lenguaje para transmitir un mensaje del modo más ajustado a la realidad frente a la incursión, cada vez mayor, de lo políticamente correcto y socialmente establecido en el discurso periodístico.
Así lo ha advertido la princesa de Asturias, que destacó como «con el lenguaje se puede maquillar la realidad» y se preguntó si esa es «la pretensión del lenguaje políticamente correcto». «El cuidado de las palabras y la amabilidad -se respondió- no están reñidos con el rigor, que al fin y al cabo es lo que prima en el ejercicio de la profesión periodística, en la que nunca sobrarán el rigor y el respeto. Rigor para contar con propiedad y precisión lo que ocurre.
Y respeto para no excluir y para tener siempre consideración hacia los demás». Además, Letizia se planteó si la corrección política oculta la realidad al recurrir a los eufemismos y si esos cambios en las palabras alteran la realidad.
El seminario de Yuso pretende debatir sobre el discurso políticamente correcto «con objetividad y serenidad», según destacó el director de la Real Academia Española (RAE), José Manuel Blecua antes de que el pensador, profesor y ensayista José Antonio Marina leyera una lección inaugural que tituló La inteligencia lingüística.
Dictadores
Marina ha disertado sobre el tremendo poder del lenguaje, su capacidad conformadora y transformadora de nuestro cerebro, de convertirnos en seres humanos, dotarnos de identidad y razón, y permitirnos asimilar nuestra historia y nuestra realidad. «Debajo de todo lenguaje políticamente correcto hay alguien que lo prescribe, y debemos averiguar quién es el que lo dicta, para saber si puede llegar a ser un dictador», ha alertado. El lenguaje es a la vez «fuente de nuestra libertad» y «de muchas de nuestras condenas», ya que con las palabras «con las que vivimos y respiramos» se pude seducir, manipular, sugerir, convencer, disentir, transformar en influir en la manera de sentir, pensar o actuar de los demás. «Debemos saber cuándo utilizamos bien o mal un herramienta tan poderosa como el lenguaje, cuyo uso inadecuado puede traicionar a educadores, políticos, periodistas o lingüistas» ha sentenciado Marina. «Su enorme potencia encierra toda la magia de los símbolos y de él depende toda nuestra estructura inteligente, que es esencialmente lingüística», ha concluido.
El presidente de La Rioja, Pedro Sanz; el consejero delegado del BBVA, Ángel Cano, y el presidente de la Agencia Efe, Álex Grijelmo, han abierto junto a la princesa de Asturias y el director de la RAE esta reunión que organizan la Fundación del Español Urgente (Fundeu, BBVA) y la Fundación San Millán.
En los debates, que se sucederán hasta el jueves, participan profesionales de todos los ámbitos de la comunicación y la docencia. En la sesión inaugural han analizado las clave del Lenguaje del poder periodistas como Ernesto Ekaizer, políticos como Pío Cabanillas, lingüistas como Marina Fernández o publicistas como José Antonio Llorente. También indagarán en la claves del Lenguaje informativo de las guerras, el terrorismo, la mafia y el narcotráfico periodistas como Rosa María Calaf, Judith Torrea o Rafale Jorba.
Magí Camps, Verónica Villafañe, Ricard Zapata o Jorge Gimeno debatirán sobre el lenguaje en torno a la inmigración, cooperación, los grupos étnicos y religiosos minoritarios. Los últimos debates girarán en torno al trato lingüístico en los medios a discapacitados físicos y psíquicos y la relación entre sociedad y homosexualidad.