La lluvia de reconocimientos para ese movimiento apadrinado por unos visionarios como Novo Cine Galego sumó ayer en Buenos Aires otro aguacero de éxito. La película de Eloy Enciso Arraianos obtuvo en el Bafici, el Festival Internacional de Cine Independiente bonaerense -el de mayor prestigio en América Latina- el premio a la mejor película dentro de la sección Género y vanguardia en la que competía. El jurado de esta sección del XV Bafici, compuesto por el director argentino Gonzalo Castro, la crítica de The New York Times Stephanie Zacharek y el director del Festival de Sitges, Ángel Sala, decidió por unanimidad otorgar a Arraianos este premio, que viene a sumarse al que la obra de Eloy Enciso obtuvo hace unos meses en el Festival de Cine de Sevilla.
Arraianos, que estuvo también en la selección oficial de Locarno, donde se estrenó el pasado verano, pasa a ser ya una de las obras de referencia del panorama de festivales de este último año. La película, que participó también en el Fecunam mexicano, el festival de Vancouver y que tuvo su estreno en Galicia en el marco de Cineuropa, parte de un texto de Jenaro Marinhas del Valle, O bosque, guionizado libremente por el propio Eloy Enciso y Jose Antonio Sande.
Las otras dos participaciones de autores gallegos, que no competían, encontraron refuerzo en su paso por Buenos Aires. VidaExtra, de Ramiro Ledo obtuvo excelente respuesta de la crítica.
Y Costa da Morte, el fascinante avance de veinte minutos de la nueva obra de Lois Patiño, apunta formas de película de largo recorrido internacional cuando sea más que este avance de abrumadora belleza.
«Berberian Sound Studio», mejor filme
Jonás Trueba, que competía en la Sección Oficial con la euforizante «Los Ilusos», recogió el premio al mejor actor, para Francesco Carril. La mejor película fue «Berberian Sound Studio», filme del británico Peter Strickland , para algunos obra de culto, y de la cual este cronista solo recuerda la culta somnolencia provocada por su vacua y estridente pretenciosidad dodecafónica.