Ray Bradbury, los sueños y el hombre

Xesús Fraga
xesús fraga REDACCIÓN / LA VOZ

CULTURA

En su libro, Garci defiende a Ray Bradbury no solo como un grande de la ciencia ficción, junto a Arthur C. Clarke y Philip K. Dick, sino que lo eleva a la categoría de clásico de la literatura universal
En su libro, Garci defiende a Ray Bradbury no solo como un grande de la ciencia ficción, junto a Arthur C. Clarke y Philip K. Dick, sino que lo eleva a la categoría de clásico de la literatura universal newscom

Hatari! Books reedita el inencontrable estudio que en 1971 le dedicó José Luis Garci al autor de «Fahrenheit 451» y «Crónicas marcianas»

25 jul 2019 . Actualizado a las 05:00 h.

En 1971 el escritor norteamericano Ray Bradbury (1920-2012) era ya un referente para los lectores de ciencia ficción gracias a obras clásicas como Fahrenheit 451 y Crónicas marcianas. Uno de esos lectores devotos era el entonces crítico y guionista José Luis Garci (Madrid, 1944), que había descubierto su obra gracias a una revista argentina, Más Allá, y había ido construyendo su propia biblioteca del autor con ediciones latinoamericanas.

Llevado por su admiración hacia la obra de Bradbury y la falta de información sobre el escritor, Garci vio la necesidad de un libro que sumase ambas facetas y resolvió hacerlo él mismo. Para hacer frente a la ausencia de datos fiables, decidió escribirle al propio Bradbury, quien desde el comienzo apoyó el proyecto y aportó aquello que Garci necesitaba. El resultado fue Ray Bradbury, humanista del futuro, un volumen -con portada de Daniel Gil- que abordaba en una primera parte la faceta más humana del escritor y dedicaba la segunda al análisis de una única obra, El hombre ilustrado. Llevaba, también, una introducción de Bradbury en la que dejaba patente su interés por Picasso y las Pinturas Negras de Goya.

Aquella edición se volvió tan inencontrable que Luis Alberto de Cuenca, en la nueva versión a cargo de Hatari! Books, la compara con «ese último cromo que no hay manera de encontrar ni los domingos en el Rastro». Además del prólogo de De Cuenca, la revisión ampliada del libro original incluye una larga entrevista de Andrés Moret y Eduardo Torres-Dulce con Garci, quien rememora las circunstancias en las que descubrió la obra de Bradbury, cómo se gestó el libro y su recepción, que fue causa de una amistad entre el cineasta y el escritor que se habría de prolongar hasta la muerte del segundo.

Con vocación de estilo y sello personal, Garci examina la evolución vital de Bradbury, desde sus comienzos y su admiración por Lon Chaney, pasando por la caza de brujas de McCarthy o sus colaboraciones con John Huston. También elogia el trabajo a la hora de difundir la obra del escritor por la editorial Minotauro, así como las traducciones firmadas por Francisco Abelenda, seudónimo del fundador del sello, el gallego Francisco Porrúa. De la lectura emerge un retrato detallado de Bradbury y, sobre todo, su reivindicación como uno de los grandes literatos universales.