Ernest Urtasun, un ministro de Cultura antitaurino con poca experiencia en gestión cultural

CULTURA

Ernest Urtasun
Ernest Urtasun Juan Carlos Hidalgo | EFE

El portavoz de Sumar toma el relevo de Iceta al frente de una cartera que se desprende de Deportes

20 nov 2023 . Actualizado a las 17:39 h.

Ernest Urtasun (Barcelona, 1982) —portavoz de Sumar, aguerrido ecologista y antitaurino— se pone al frente del Ministerio de Cultura que, en el nuevo reparto de Pedro Sánchez, se queda sin competencias en Deportes, que pasan a la cartera de Educación. Hijo de la izquierda catalana más exquisita, militante desde crío, la mano derecha de Yolanda Díaz es un perfil más político que técnico, bregado en el Parlamento europeo, pero con poca experiencia en el barro: apenas ha desenvuelto tareas de gestión cultural.

Urtasun, miembro de En Común Podem, será el quinto ministro de Cultura de Sánchez en cinco años, una cartera que ya intentaron reflotar el fugaz Máximo Huerta, que estuvo en el cargo siete días; el fallecido José Guirao; José Manuel Rodríguez Uribes y Miquel Iceta. Temas pendientes tiene unos cuantos: del Estatuto del Artista —sobre la mesa desde el 2021 y aún por concretar— hasta la nueva Ley del Cine —congelada por el adelanto electoral— pasando por la Ley de Mecenazgo, que el sector lleva años reclamando. 

Segundo ministro más joven del nuevo Gobierno —le lleva un año a Pablo Bustinduy que, con 40, acaba de ser nombrado responsable de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030—, Urtasun se licenció en Economía por la Universidad Autónoma de Barcelona tras cursar sus estudios en el Liceo francés, miembro de familia acomodada de raíces navarras. Sus padres, militantes del Partido Socialista Unificado de Cataluña (PSUC), le inocularon pronto la política en vena y con 15 años empezó a militar en Joves d'Esquerra Verda. Al terminar la carrera se matriculó en un máster en Relaciones Internacionales y a los 22 ya era asesor en Bruselas de Raül Romeva.

En el 2014 aparcó la diplomacia para concurrir a las europeas como número tres de la lista de la Izquierda Plural, coalición liderada por IU y que compitió también con un incipiente Podemos abanderado por su exlíder Pablo Iglesias. Se hizo ahí con escaño en la eurocámara, afianza su casilla en los comunes que, de la mano de Ada Colau, terminaron fraguando alianza con Podemos y el resto de la izquierda que consiguió el Ayuntamiento de Barcelona. De la mano de Unidas Podemos volvió a repetir en Bruselas, optando desde el inicio por adscribirse al grupo Los Verdes/Ale, donde fue designado vicepresidente.

Ernest Urtasun es un referente verde, completamente volcado durante la campaña electoral en algunas de las principales propuestas en materia de lucha contra el cambio climático, como la reducción de los vuelos domésticos inferiores a tres horas y la férrea oposición a la energía nuclear. Veremos de qué manera gestiona la afrenta de los ecologistas a las obras de arte para obtener foco y altavoz. Convencido antitaurino deberá lidiar también con un «arte», según la RAE, que el Ejecutivo entiende como «patrimonio cultural».

El suyo es un perfil transversal, como transversal es el peso que Sumar dio en su programa electoral a la Cultura, apostando por mejorar las condiciones de los trabajadores del sector y ampliar el presupuesto destinado a esta cartera. Entre sus promesas también está la de dilatar los marcos del Bono Joven para llegar a más beneficiarios, revisar la financiación del cine español por parte de las televisiones y reforzar la libertad de expresión.