Los Premios de la Academia de la Música de España refrendan la última obra del músico vigués. Ajeno a la nostalgia, sigue entregando grandes canciones que recogen el pulso de la cincuentena
11 jun 2024 . Actualizado a las 18:21 h.Hace ya tiempo que Iván Ferreiro logró eso a lo que aspiran la mayoría de los artistas: una personalidad tan grande que hace que el oyente identifique cualquier tema suyo en cuestión de segundos. En los últimos tiempos, el vigués ha alcanzado otro estadio deseado por la gran mayoría de sus compañeros de profesión, tan o más difícil que el anterior: moverse en una madurez en donde la inspiración, lejos de decrecer, hace piruetas tan notables como el disco Trinchera pop (2023).
Ese álbum —que suponía su primera obra de estudio en siete años— acaba de ser reconocido en la primera edición de los Premios de la Academia de la Música de España, unos galardones que aspiran a convertirse en los Goya de su campo. En el listado final, Ferreiro aparece como autor del mejor álbum de pop-rock por el título citado. También como compositor del año por la canción En las trincheras de la cultura pop, creada sobre un fragmento de Las cuatro estaciones de Vivaldi.
No ha sido el más premiado de la gala que tuvo lugar el pasado lunes en Madrid —ese foco perteneció a Arde Bogotá, con seis premios certificando su dulce momento—, pero sí uno de sus protagonistas. El excantante de Piratas se muestra, en la cincuentena, como una voz imprescindible de la música española sin tener que claudicar a la nostalgia. «Quise hacer el disco de pop de una persona de 52 años», señalaba en una entrevista en La Voz en marzo del 2023, cuando salió Trinchera pop. «La palabra pop está muy denostada en los adultos —añadía—. Me da la sensación de que la gente de mi edad huye de esa palabra para acudir a otros estilos que considera más elevados intelectualmente. Para mí, la manera de elevarlo intelectualmente es llamarlo por su nombre: pop. Cuando me enfrento a un disco mío pienso en la edad que tengo y no quiero estar desfasado. No quiero hacer nada que no tenga que ver conmigo. Creo que tengo que ser consciente de la edad y, desde ahí, hacer algo coherente».
El disco —que, además de la premiada En las trincheras de la cultura pop, contiene En el alambre, una de las mejores canciones de su carrera y símbolo total de esta etapa— hace un repaso por los conflictos familiares que se eternizan y la importancia de la música en todo eso, de ahí que la simbolice como una trinchera. También aparece la presbicia, los dolores de espalda y otros tics del devenir adulto. «No te cansas de sentirte siempre fuera de lugar», canta en la mencionada En el alambre, demostrando que la extrañeza adolescente no se evapora pese al paso del tiempo.
Un tema que se podrá escuchar en los conciertos que dará este verano en Galicia. Actuará el 26 julio en el Morriña Fest de A Coruña; el 8 de agosto en Costa Feira Sanxenxo; y entre el 6 y el 8 de septiembre en Osa do Mar de Burela. En estas citas, Ferreiro volverá a colocarse en su trinchera de canciones para agrandar su obra.