?l Compostela busca respuestas a sus dos últimas derrotas. Y todos los análisis coinciden en las líneas básicas. El equipo está regalando demasiado, le cuesta mucho marcar y tampoco le acompaña la fortuna. Evidentemente, si esa dinámica no cambia, lo pasará muy mal. También hay un dato en el que coinciden todas las voces: nadie ha pasado por encima del Compos con contundencia, salvo la Cultural Leonesa en la última media hora de su partido. Hasta el segundo tanto, los de Luis Ángel Duque no las tenían todas consigo. Chico, uno de los nuevos en San Lázaro y también uno de los jugadores que mejor conoce la categoría, pide un voto de confianza para este Compostela. Y lo argumenta: «Entre los que hemos fichado y los que vienen del filial, hace falta tiempo para acoplar el equipo. Tenemos el sistema pero nos falta interpretarlo bien. Hay que mejorar cosas en la presión y también a la hora de finalizar las jugadas. Eso se consigue con trabajo, día a día». Lagunas de juego El delantero, más que quejarse por la falta de forunta apunta que «las lagunas, a veces, aparecen porque aún falta algo de coordinación, de funcionar como equipo. Tenemos que aprender a ser un equipo. Para eso son precisos un par de partidos sólidos». En opinión de Vicente Fidalgo, la explicación es diáfana: «Concedemos demasiado y para poder hacer un gol necesitamos disponer de muchas oportunidades». Y hace repaso de lo que ha ocurrido: «Ante el Zamora, la Cultural y el Talavera cometimos errores que son subsanables. Por ahí se nos escaparon los partidos». Además, añade que «el equipo está teniendo llegada. Pero, mientras los demás necesitan tres para hacernos un tanto, a nosotros no nos basta con eso». Para el centrocampista vigués, la senda que debe seguir el Compostela es la que completó ante el Mirandés. A diferencia de las otras jornadas, no hubo concesiones y bastó con cazar una de las jugadas en el área rival para sumar los tres puntos. El entrenador, Pichi Lucas, no oculta su preocupación pero tampoco quiere caer en el pesimismo: «Las últimas derrotas no son fiel reflejo de lo que ha pasado en el campo. Ningún equipo ha pasado claramente por encima del Compostela». Pero también tiene claro que, con eso, al conjunto santiagués no le basta para remontar el vuelo. Y apela a la paciencia para que el colectivo pueda desarrollar todo su potencial. Golpe en un tobillo Vicente Fidalgo se ha convertido en las primeras jornadas en un futbolista con peso específico en el engranaje ofensivo de los blanquiazules. Ayer no se ejercito con el grupo, por unas molestias en un tobillo. No les da mayor importancia y confía en estar a punto para el encuentro de Toledo. Chico sigue ganando minutos, aunque aún no se ha estrenado en la titularidad. Reconoce que le falta chispa y velocidad, que quizás necesite un par de partidos más para acercarse a su nivel óptimo. Pero se ve preparado para jugar: «Puedo estar para unos sesenta minutos al cien por cien o todo el partido a un setenta por cien»