Míster Donato, de prácticas en Ferrol

DEPORTES

El ex jugador del Dépor se foguea con los juveniles del Racing para lograr el título nacional en verano. Admirador de Rijkaard, aconsejó a la zaga y no levantó la voz

09 feb 2008 . Actualizado a las 02:00 h.

Donato está hecho un chaval. De prácticas anda el ex jugador del Dépor, retirado en la élite a los 40 años. El Abuelo no vuelve, pero se prepara para el banquillo. Hace días que participa en los entrenamientos de los juveniles del Racing como parte de la formación para lograr el título nacional en verano. Será míster Donato.

Vestido en un chándal verde de la federación española, Donato deja el protagonismo al entrenador del grupo de menor edad de los juveniles, Stili, un chaval más joven que él, pero que ya lleva tiempo dirigiendo. El hispanobrasileño ocupa un discreto segundo plano hasta que le encargan ejercicios con la defensa. Tira de apuntes y congela la mirada de cinco chavales. «Hay que ahorrar esfuerzos, saber colocarse, no correr por correr». Palabra del Abuelo, que a los 39 abriles participó en la Copa que acabó en el centenariazo .

Al rato, aconseja que no se defiende mejor al acercar más hombres a la portería. E insiste en adelantar la defensa y evitar «automatismos» que no ayudan.

En Madrid comparte pupitre con Fernando Hierro, Toni Jiménez, Pochettino, Mono Burgos, Esnáider... Donato aprovecha las ventajas de los ex futbolistas de alto nivel, que pueden sacar el título en un proceso corto si acumulan siete años en la Liga y cinco partidos como internacionales.

Como alumno, está encantado. No quiere citar profesores que le gusten más, pero nombra los de las asignaturas más prácticas: «Pepe Mel nos imparte táctica e Iñaki Sáez técnica». Y evita adelantar su futuro estilo en el banco. «El fútbol cada día cambia. En función de los jugadores que tengas, montarás un esquema y la idea. Es distinto dirigir al Madrid que al Recre».

Evita abrazar el estilo de un entrenador concreto -«no quiero ser una copia de nadie»-, pero admira a Frank Rijkaard «porque es sencillo, por su tranquilidad y su defensa constante de los jugadores». También recuerda con cariño al ahora cuestionado Luis Aragonés: «Es un amigo del que aprendí mucho. Todos los jugadores hablan bien de él, porque tiene una gran personalidad y siempre es un apoyo de los futbolistas».

Sincero como futbolista, Donato es diplomático como técnico en prácticas. Durante más de veinte años como profesional, sufrió y disfrutó con muchos entrenadores, pero ahora reparte flores al acceder a un repaso de algunos de los más carismáticos: «Con Javier Clemente estuve en el Atlético y tiene un carácter fuerte, pero se explica muy bien y sabes lo que quiere. Arsenio fue como un padre para los jugadores, por como nos cuidaba, y le quiero un montón. Con Toshack el equipo estaba muy bien asentado en el campo, y eso me gustaría cogerlo, aunque le gustaba hacer muchos cambios en el sistema, y a veces no era bueno porque confundía a algunos jugadores. Irureta hizo un buen trabajo en el Dépor, que vivió sus mejores épocas. Supo aprovechar su plantilla», repasa.

Insignificante

Donato encontró en Ferrol la máxima colaboración para sus prácticas. Por eso habla dolido por la desidia del presidente del Deportivo hacia tantos veteranos ilustres. Ni como agente ni como futuro entrenador recibió una llamada del mandatario. «No entiendo lo que pasa. José Ramón y Manjarín también tienen el título. No sé como los ex jugadores no trabajan en el Dépor». El año pasado, había hecho ya sus primeras prácticas con la chavalada del Ural.

La sesión de trabajo en Ferrol termina y el entrenador de los juveniles pide al ex jugador del Dépor lo que ellos no se atreven a preguntar. «Dicen que si lanzas ahora unas faltas con ellos, a ver qué tal. Y les explicas».