El ilerdense Albert Costa, nacido el 25 de junio de 1975, firmó ayer su contrato por un año como nuevo capitán del equipo español de Copa Davis. Su permanencia en el cargo dependerá de lo que resulte en las elecciones a la presidencia de la Real Federación Española de Tenis, previstas para el próximo mes de marzo. Por cierto que en el acto de presentación de Costa como seleccionador, Pedro Muñoz, todavía máximo dirigente del tenis español, dejó entrever su deseo de presentar su candidatura a la presidencia, algo que en modo alguno ha sentado bien a Rafael Nadal. El de Manacor sigue, erre que erre, en su invariable actitud de no compartir para nada una posible decisión de Pedro Muñoz de continuar al frente del elenco federativo.
Costa, que participó en la conquista de la Copa Davis 2000, lograda ante Australia en el Palau Sant Jordi de Barcelona, debutará como seleccionador el mes de marzo ante un tándem tan potente como el de Serbia, en el que Novak Djokovic, número 3 del mundo, es la primera estrella de la entidad balcánica.
El técnico deseado
Albert Costa es el técnico que propugnaban los jugadores españoles. La elección del nuevo capitán surgió de una terna en la que también estaban Alex Corretja y Tomás Carbonell, actualmente ambos comentaristas de televisión. Durante las dos últimas temporadas, Albert Costa asesoró a Feliciano López, cuyo ránking ha mejorado notablemente. El técnico de Lleida logró doce títulos a lo largo de su carrera profesional. Fue campeón de Roland Garros en el año 2002 tras derrotar, contra pronóstico, en la final a Juan Carlos Ferrero por 6-1, 6-0, 4-6 y 6-3.
En competiciones del circuito ATP ganó un total de 385 partidos y perdió 273. Sus ganancias como tenista profesional llegaron a la cifra de 7.685.228 dólares. Profesional desde el año 1993, Costa escaló al sexto puesto de la clasificación mundial el 22 de julio del 2002. En dobles solamente se anotó un título. En esa modalidad disputó 87 encuentros, con un total de 30 victorias. Entre sus recursos para el juego brillaba el revés a una mano.