Mientras las posibilidades de triunfo en el Masters de Augusta de los españoles Jiménez y García se esfumaron en la tercera ronda, la conferencia de prensa del campeón todavía podría ser en lengua española gracias al formidable trabajo del argentino Ángel Cabrera, empatado en cabeza con Kenny Perry, undécimo del mundo.
Perry, el viejo zorro del Tour, tiene su gran oportunidad de lograr entrar en el selecto grupo de ganadores del Masters. Él y Cabrera lideran el torneo con los mismos golpes (205, 11 abajo). Compartirán partido en los últimos y emocionantes 18 hoyos en el Augusta National, uno de los templos del golf mundial.
Cabrera, que a los 39 años se resiste a aprender el idioma de Shakespeare, se acerca a la Chaqueta Verde, a su segundo título de Grand Slam después del Open estadounidense de 2007 y al tercer major en la historia del golf argentino tras el conquistado en 1967 por Roberto de Vicenzo (Open Británico).
Argentina está en vilo con Cabrera, y el sastre de Augusta sufre pensando que deberá cortar mucha tela verde para confeccionar una chaqueta a medida para el corpachón del golfista cordobés.
El golfista sudamericano hizo ayer 69 golpes, en otra tarjeta por debajo de los 70 en Augusta (68 y 68 en los dos primeras jornadas). Su pegada, su excelso juego corto y el manejo certero del putt le convierten en un referente en el campo.
Dos birdies en los hoyos 15 y 17 aceleraron la vuelta del argentino, que en ese hoyo empató con Perry en el liderato, ambos con 11 bajo par y en un día con greens blandos por las tormentas nocturnas.
Perry, de 48 años, estiró sus arrugas al ver cómo su máximo contendiente, Chad Campbell, se hundía en la arena del búnker del hoyo 16. Perry podría convertirse en el ganador de mayor edad de la historia del Masters y de todos los torneos de Grand Slam.
Cabrera y Perry aventajan en dos golpes a Campbell. Los estadounidenses Jim Furyk y Steve Stricker son cuarto y quinto, con tres y cuatro golpes de desventaja respectivamente, mientras Sabbatini, Katayama y Hamilton comparten la sexta plaza, a cinco golpes. A siete golpes figuran Tiger Woods, que ayer comenzó con doble bogey en el uno, y Phil Mickelson.
La jornada fue despiadada para Jiménez, con doble bogey en el 12 y triple en el 16, para sellar una tarjeta de 78 golpes. Sergio García no aprovechó su posición de inicio (sexto) y con 75 golpes se alejó en exceso de la cabeza (10 golpes) y del título.