Los Boston Celtics, a una sola victoria de ser campeones tras un mal partido de Pau Gasol

Amador Gómez MADRID/COLPISA.

DEPORTES

15 jun 2010 . Actualizado a las 02:00 h.

Al igual que ocurrió hace dos años, el anillo de la NBA parece estar destinado al potencial del equipo, no al de las individualidades. En el quinto partido de la final, los Celtics desnudaron la kobedependencia que sufren los Lakers, obligados a arreglar el desaguisado en los dos próximos encuentros en su cancha de Los Ángeles.

Con 2-3 a favor de los Celtics, los vigentes campeones deberán salvar un match ball este martes en el teatro del Staples Center para forzar un séptimo y definitivo encuentro el jueves, o se despedirán definitivamente del sueño de revalidar la corona.

La ansiada revancha de los Lakers está ahora más lejos, después de la dolorosa derrota sufrida en el Boston Center (92-86), forjada por los Celtics con 27 puntos de Paul Pierce y 18 puntos y 10 rebotes de Kevin Garnett, pese al extraordinario rendimiento de Kobe Bryant, autor de 38 puntos, pero que estuvo solo contra el mundo. Es el mejor jugador de la Liga norteamericana y uno de los más grandes de la historia, pero su impresionante exhibición no sirvió de nada en un choque clave. A pesar de Kobe, el bloque de Boston, con más hambre de gloria y más juego colectivo que los Lakers, ya está a un paso del anillo, tras un mal partido de Pau Gasol (12 puntos y 12 rebotes), en su peor actuación en la serie final.

Garnett, inmenso

Solo Kobe y Pau, maniatado por la defensa de Kendrick Perkins y esta vez también empequeñecido ante Garnett, superaron la decena de puntos por parte de los defensores del anillo, que, sin espíritu de grupo y fiados a las genialidades del escolta de Filadelfia, fracasaron en defensa, en agresividad e intensidad, y dejaron en evidencia a los Lakers.

Si no llega a ser por su gran estrella, los californianos habrían recibido un varapalo aún mayor. Cuatro jugadores de los Celtics se apuntaron dobles dígitos en ataque, ya que además de Pierce y Garnett también se sumaron a la ofensiva Rajon Rondo (18 puntos) y Ray Allen (12).

Con Gasol desorientado, al menos en un quinto choque que se presumía trascendental para los ánimos, solo emerge Kobe, que al inicio del tercer cuarto anotó la bestialidad de 19 puntos consecutivos. Pero un solo hombre, por muy sobrenatural que sea, no puede contra todos. Bryant se quedó sin su escudero, el ala-pívot español, el banquillo de los Lakers fue otra vez raquítico, y los angelinos hincaron la rodilla en el peor momento. Pese a que Gasol fue el máximo reboteador del partido, quedó limitado a 5 de 12 en tiros de campo, sin una sola asistencia.

Los Celtics, el mejor equipo fuera de su cancha, ya han triunfado una vez en Los Ángeles y han sido capaces de ganar dos partidos consecutivos a su eterno rival.