San Emeterio pasó en un año de tercer alero del Baskonia a figura en Europa
26 dic 2010 . Actualizado a las 02:26 h.A veces, el mundo del deporte da lecciones de vida. Se encarga de demostrar que la línea que separa el éxito del fracaso es tan fina que depende únicamente de detalles. Y eso es lo que debe pensar Fernando San Emeterio (Santander, 1984), posiblemente el jugador español más en forma del momento en Europa.
Este espigado jugador exterior (1,99 metros), con velocidad de escolta, pasó en solo un año de tercer alero del Baskonia, y prácticamente descartado, a ser héroe de la última Liga, segundo en valoración de la ACB y mejor nacional de la presente edición de la Euroliga. Un rendimiento que además le permitió recibir la convocatoria con la selección para el último Mundial, aunque luego Sergio Scariolo apenas contase con él.
«No cuentas para el técnico»
La rocambolesca historia de San Emeterio arrancó en el verano del 2009, concretamente mediado el mes de agosto. El club le comunicó que no entraba en los planes del entrenador (Ivanovic), y empezó a negociar su salida del Baskonia. Cuando parecía que las negociaciones con el Cajasol estaban a punto de cerrase, los sevillanos se negaron a pagar un traspaso por él y la operación se paralizó.
Apareció en escena el Real Madrid con dinero fresco y se llevó a Sergi Vidal. Como el capitán de los vitorianos se iba, Ivanovic optó entonces por cambiar de parecer y apostó por «repescar» a San Emeterio. Una decisión que a la postre iba a cambiar el desarrollo de la Liga.
Ya en el mes de febrero, en el Buesa Arena de Vitoria podían escucharse gritos de «¡MVP, MVP!», en referencia al protagonista de esta historia. El alero cántabro explotó de tal forma que pasó a ser imprescindible y se convirtió en uno de los jugadores con más minutos de juego del equipo. Sus actuaciones en la final de la Liga fueron claves para que el Baskonia se hiciese con el título. De hecho, anotó el tiro libre decisivo en la última victoria.
Reconocimiento mundial
Sergio Scariolo decidió premiarlo con la convocatoria para el último Mundial de Turquía, pero su participación con la selección española fue casi testimonial. El italiano prefirió jugar con dos escoltas como Rudy Fernández y Juan Carlos Navarro, con Álex Mumbrú como segunda opción.
Esta temporada, su rendimiento no ha disminuido, ni mucho menos. Con una valoración media de 18,9 por partido, es el segundo mejor jugador de la presente Liga ACB, solo superado por Esteban Batista (Fuenlabrada), con 19,1. Sus números por partido lo dicen todo: 13,1 puntos, 5,5 rebotes y 3,1 asistencias en 32 minutos. Además, es el mejor jugador de los equipos ACB en la fase regular de la Euroliga, después de 33,3 minutos por partido, anotar una media de 13,7 puntos, atrapar 5,2 rebotes y lograr una valoración de 18,5.