Pedreña espera a miles de personas para dar el último adiós a Ballesteros

madrid / efe

DEPORTES

El funeral se oficiará en la iglesia parroquial de San Pedro, a partir de las 13 horas.

11 may 2011 . Actualizado a las 06:00 h.

Pedreña, la pequeña localidad cántabra donde vino al mundo Severiano Ballesteros, verá hoy cuadruplicada o quintuplicada su población, sus calles quedarán colapsadas y hasta tres pantallas gigantes ofrecerán en directo el funeral por el alma del golfista español, fallecido el pasado sábado. El funeral se oficiará en la iglesia parroquial de San Pedro, a partir de las 13 horas.

Decenas de agentes de policía y miembros de la Guardia Civil velarán por la seguridad y el orden ante la previsible llegada de una muchedumbre, que ni familia ni autoridades son capaces de concretar, al pueblo natal de Seve, al sur de la bahía de Santander. La multitud saturará una localidad cuyo número de vecinos no supera las 1.480 personas.

Pese a la magnitud y proporciones descritas, el acontecimiento no ha cogido por sorpresa a la familia Ballesteros Sota, aunque para la organización global hayan precisado la ayuda del Gobierno de Cantabria. La actividad durante las últimas 48 horas en casa de los Ballesteros ha sido frenética y extremadamente agotadora ante la gran cantidad de detalles por resolver: el primero de ellos, cómo compensar las reducidas dimensiones de la iglesia, pues solo da cabida en su interior a 300 personas, en 40 alargados bancos de madera. Por ello, el funeral podrá ser seguido en directo fuera del templo por medio de tres pantallas gigantes, instaladas en lugares estratégicos de la localidad.

La familia y amigos más íntimos, los miembros por confirmar de la Casa Real, de los Gobiernos central y cántabro, así como de las distintas instituciones deportivas podrán seguir el funeral en el interior de la iglesia. Las cenizas de Seve saldrán de su casa de Pedreña a las 12.50 horas, portadas por sus hijos y hermanos hasta la parroquia del pueblo.

La comitiva será acompañada por el equipo de remo de Pedreña y una serie de niños y niñas que vestirán el uniforme de la Fundación Seve Ballesteros.