Los futbolistas del Dépor que más minutos disputaron en Sabadell disfrutaron ayer de un entrenamiento menos exigente que el resto en la vuelta al trabajo en Abegondo. Con los sufridos estiramientos de Morel al término de cada ejercicio, Oltra ordenó un trabajo de posesión en que sus jugadores, divididos en dos equipos, debían completar diez pases seguidos sin que el rival interceptase el balón y finalmente dárselo al portero para que contabilizase gol. El técnico insistió en la necesidad de que asegurasen las líneas de pase, así como en el intercambio constante de acciones de ataque y defensa.
Pablo Álvarez se entrenó al margen sobre el césped. A la sesión faltó el preparador de porteros, José Sambade, quien se encontraba en la tercera jornada del curso Especialista en entrenamiento de porteros, especialidad: fútbol, que dirige en la Federación.