
Al pívot del Obradoiro le encanta jugar al golf en sus ratos libres, ver cine y escuchar música
12 sep 2013 . Actualizado a las 00:00 h.Moncho Fernández ya es un poco más feliz. El entrenador del Obradoiro sonríe un poco más cada día que pasa. El martes regresó el base Rafa Luz. También pisó Sar por primera vez el pívot Mike Muscala, aunque trabajó de forma muy suave nada más aterrizar en la capital gallega. Ayer sí se ejercitó a tope con sus compañeros. Hoy llega Pavel Pumprla. Así, el técnico obradoirista va completando su plantilla y aumentando la calidad de los entrenamientos.
Poco a poco el Obradoiro va presentando de forma oficial los integrantes de su plantel. Ayer le tocó el turno a Mike Muscala, que arribó a Santiago el martes, entrenó y pasó el reconocimiento. El pívot, que contestó a las preguntas de los diferentes medios de comunicación es español, llega a la capital gallega con la idea de creer y mejorar como jugador.
Al hablar de este refuerzo, el técnico santiagués Moncho Fernández fue muy claro y muy optimista. «Es una gran persona y muy trabajador, que llega a nuestro club con muchísima ilusión». Así lo presentó el de Pontepedriña. El deseo del técnico es que el joven pívot regrese a casa para jugar en el Atlanta Hawks: «Si vuelve será porque hizo una gran temporada en el Obradoiro», subraya.
Además, Moncho Fernández pidió «paciencia» para la evolución del jugador porque es «muy joven». Lo que tiene claro el responsable del vestuario es que el norteamericano «dará lo mejor de sí mismo para conseguir los objetivos» del Obradoiro. Destacó su juventud y que es muy buena persona, pero también analizó técnicamente este refuerzo: «Es un interior muy polivalente, con un tiro aceptable de media distancia. Corre muy rápido la pista, pero destacaría sobre todo su capacidad defensiva, pues nos ayudará con su rebote y en la intimidación. Nos va a ayudar en muchas cosas», resumió.
Mientras, Óscar Rodríguez, miembro del consejo de administración, destacó que se realizó un «seguimiento muy intenso» del jugador e insistió en que al club «le parece una gran apuesta de futuro».
Arribar a Santiago es, para Mike Muscala, cumplir su «sueño de jugar en el baloncesto profesional». Está «muy contento» con esta opción y feliz por llegar a «una ciudad que apoya muchísimo a su equipo».
Buena oportunidad
Ve en su fichaje por el Obra «una oportunidad muy buena» para él y para su «futuro como jugador». El cinco santiagués era su mejor opción y llevaba ya un mes «con muchas ganas» de aterrizar en la capital gallega para conocer la ciudad, el equipo y a sus compañeros. Sabe que militará en la segunda mejor liga del mundo, que tendrá grandes rivales enfrente y que costará mucho ganar partidos. Pero Muscala entiende que fichó «por un buen equipo».
Confía en que «hablar español hará más fácil la adaptación», tanto a la ciudad como al equipo. Dice que tiene que mejorar el idioma, pero sabe que posee una buena base para en pocos meses expresarse correctamente. Le gusta jugar al golf en sus ratos libres, aunque Moncho Fernández dejó muy claro en la presentación que «tendrá poco tiempo libre». Le encanta la música y pasar sus momentos de descanso viendo películas.