El moañés considera a las Superbikes la categoría perfecta para crecer
16 abr 2014 . Actualizado a las 06:00 h.Tras la abrupta despedida de Moto2, Dani Rivas ha encontrado su ecosistema en las Superbikes, las grandes animadoras del campeonato de España de velocidad. El moañés se dejó ver en la calificación de la primera prueba del nacional con un segundo puesto en la pole, pero un problema de mecánico le relegó a la décima plaza en la carrera. En el bautismo competitivo del curso comprobó que está en la categoría perfecta para firmar la temporada que lleva tiempo esperando.
«Con la moto, con los neumáticos y con el equipo estoy muy contento, nos quedan muchas cosas por hacer, somos los nuevos en la categoría, pero nos faltó rematar la faena», comenta el moañés a cerca del primer fin de semana de competición.
Su puesta de largo resultó de los más alentador, tanto en los entrenamientos libres como en la pole, pero todo se vino abajo en la carrera. «Se me cerró la dirección saliendo de la curva cuando había soltado el freno y puesto el primer toque de gas. No me había pasado en toda la pretemporada ni durante el fin de semana, creo que pudo ser de la temperatura, que hizo bastante calor, y que el depósito estaba lleno. Casi lo salvo, pero no fui capaz», recuerda. El fallo le relegó al puesto vigésimo séptimo y desde allí fue escalando hasta el décimo, en el que finalizó la carrera.
En Jerez confirmó que los rivales están muy fuertes -« Carmelo está muy bien pero nosotros tenemos que estar ahí en las carreras, coger experiencia, hacer podios y estar lo más cerca posible de las posiciones delanteras»- pero también que se adapta a la moto y a la categoría sin ningún tipo de dificultad: «Por estatura y peso no estoy en desventaja con el resto de los pilotos, la moto es súperdivertida aunque todavía trazo bastante con las líneas de Moto2 y tengo que aprender y variar bastantes cosas».
Ahora tiene dos meses hasta la segunda entrega, en el MotorLand de Aragón para seguir aprendiendo y apurar la puesta a punto de la moto. De entrada ya está pactado un fin de semana de test en el mismo circuito de Alcañiz. Una forma de matar la espera teniendo en cuenta que en Le Mans, en donde se celebra la segunda prueba del nacional, solo se correrá en Moto3.
Por otra parte el moañés tiene el convencimiento de que ha llegado a la disciplina más emergente del momento. Tanto a nivel mediático como competitivo. «Dorna ha cogido a las Superbikes y está abriendo el campeonato, está muy reñida y va a dar que hablar. Pienso que va a ser la categoría más igualada del 2014».
Dedicarse a correr
Y por primera vez no tiene que estar pendiente del apartado presupuestario. El easyracing cuenta con el apoyo de BMW y Dunlop y a él le toca centrarse en correr. Además, con galones. «Es un equipo pequeño en donde me atienden mucho. Que se fíen tanto de lo que yo digo para mi es un extra de motivación y estoy muy a gusto». La manera de corresponder es firmando la temporada soñada.
«Por estatura y por peso no estoy en desventaja con el resto de los pilotos y la moto es superdivertida»