Los jugadores de Scolari creen que salen reforzados tras el sufrimiento pasado ante Chile
29 jun 2014 . Actualizado a las 19:53 h.Brasil se llevó un buen susto. Tras la agónica clasificación a cuartos ante Chile, el país y la selección anfitriona afrontan divididos entre la confianza y el miedo el duelo de cuartos de final ante Colombia, próximo paso en su búsqueda del sueño de conquistar en casa el sexto título en la Copa del Mundo 2014.
El optimismo es un sentimiento casi exclusivo de los pupilos de Luiz Felipe Scolari, ya que los analistas deportivos brasileños suenan más preocupados que nunca tras el drama de más de 120 minutos vivido por Brasil en el partido del sábado en Belo Horizonte. Los jugadores brasileños sostienen que la intensa batalla con Chile contribuyó a volver al equipo «más maduro», «más confiado» y «más fuerte» para enfrentarse el viernes al fútbol alegre y ofensivo de Colombia y de su nueva gran estrella, James Rodríguez. «Hemos aprendido, estamos más maduros, sabemos mejor qué significa un Mundial», dijo David Luiz, quien aseveró que, al lograr la clasificación ante un rival que «podría superar a cualquier adversario», Brasil demostró ser un equipo fuerte.
«Chile podría superar a cualquier adversario en este Mundial, y también podría habernos superado. Tiene a un excelente equipo, un equipo de guerreros. Fueron tremendos, pero también lo fuimos nosotros, porque de no haber sido así no estaríamos ahora festejando la clasificación», enfatizó David Luiz. Por su parte, el lateral Dani Alves aseveró que haber ganado la dramática batalla con Chile aumenta la confianza del equipo en su capacidad de corregir «de a poco» los errores y de seguir avanzando. «Como grupo hemos superado un obstáculo muy grande, muy difícil. Chile fue un gran adversario. La victoria sobre Chile aumentó mucho nuestra confianza», expresó.
Esto precisamente es lo que cree el entrenador de Colombia, el argentino José Pekerman: «Haber salido de un partido tan difícil eleva la confianza, ya está en cuartos de final, sabemos del potencial que tiene Brasil». Pero los analistas de la prensa deportiva brasileña son menos optimistas. Las actuaciones de Brasil en los cuatro primeros partidos del Mundial 2014 no terminaron de convencer y ahora temen una derrota ante Colombia que, según afirman, ha presentado un fútbol muy superior al exhibido por el equipo de Scolari.
Según el columnista del diario Folha de São Paulo Juca Kfouri, la principal ventaja que se llevará Brasil hacia el duelo del viernes en Fortaleza es «el peso de la camiseta» de una selección que se alzó con cinco títulos mundiales frente a un equipo que accede por primera vez a los cuartos de la máxima cita del fútbol. Aún más pesimista, el analista del canal ESPN Brasil Paulo Vinícius Coelho expresó su preocupación ante la ineficiencia del medio campo, a la que apuntó como «la enfermedad» del equipo de Scolari, a pasar del cambio introducido en la medular de Fernandinho por el muy cuestionado Paulinho.
La baja de Luiz Gustavo
«Esto debe ser corregido en los entrenamientos a partir del lunes», dijo Coelho, quien advirtió que, ante Chile, los jugadores de Brasil «se ganaron una segunda vida», pero «no van a sobrevivir a otra actuación dramática como la del Mineirão». Scolari y sus pupilos disfrutan de un día de descanso, para recuperar fuerzas y equilibrio después del drama vivido en Belo Horizonte.
El grupo volverá a reunirse el lunes y Felipão tendrá al menos un problema nuevo para solucionar: cómo reemplazar a Luiz Gustavo, quien recibió su segunda tarjeta amarilla en el choque con Chile y está excluido del duelo por el pase a semifinales. No es un problema menor. La ausencia del jugador del Wolsfburgo, que Scolari considera como «uno de los más importantes» de su equipo, podrá volver el sector defensivo brasileño más vulnerable para el fútbol alegre y ofensivo de James Rodríguez y companía.