La carrera del colombiano Juan Pablo Montoya eclosionó en la Fórmula 1 bajo las siglas del equipo Williams. El motor BMW convirtió a Montoya en uno de los pilotos más rápidos de la parrilla. Él correspondía al propulsor con el arrojo en cada giro, en cada ocasión que se le presentaba para adelantar. Aquel binomio funcionaba a la perfección. Luego lo intentó con McLaren, pero las sensaciones no fueron tan positivas. Terminó cuarto en el 2005 cuando su equipo aspiraba a ganar y en el 2006 acabó de diluirse. De pronto, sin que nadie se lo esperase, dio el salto al otro lado del charco y comenzó a correr en la Nascar, una competición de prototipos de turismos que se disputa en circuitos ovalados. No parecía el lugar más apropiado para las características de un hombre con la fama de tener unos guantes de oro. Pero finalmente acabó disputando ocho temporadas en las que hubo más sombras que brillo.
En el 2013 firma su contrato por la Indy y la temporada consiguió ganar en las 500 millas de Indianápolis. En ese circuito tiene el récord de haber participado en un mayor número de competiciones distintas: desde la Fórmula 1, la Nascar hasta la Indy. Sin duda, como vigente campeón suena en la nómina de los favoritos al triunfo final de una carrera en la que algún día se podrá tropezar con el español Fernando Alonso, quien ya manifestó al comienzo de esta temporada que le gustaría probar nuevas experiencias antes de retirarse del asfalto.
Uno de los oponentes que tendrá Juan Pablo Montoya este fin de semana, además del brasileño Castroneves, es el actual líder de las Indy Car Series, el piloto francés Simon Pagenaud que hace quince días demostró su dominio al ganar en la Angie?s List Grand Prix de Indianápolis, la quinta prueba de la temporada. Pagenaud, del equipo Penske, pilota un monoplaza con motor Chevrolet, uno de los dos suministradores, junto a Honda, de los propulsores de la competición. El triunfo fue el tercero consecutivo que conseguía Pagenaud en lo que va de la temporada de 2016.
James Hinchcliffe también figura entre los candidatos a ocupar el primer peldaño del podio al terminar las 500 millas, una tarea que les llevará más de tres horas eternas.