El coche familiar de los Ares

Alba López, P. g

DEPORTES

CESAR QUIAN

Cuatro de los cinco integrantes de la familia correrán en el Nacional de Arteixo, el sábado

09 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La gasolina corre por las venas de los miembros de la familia Ares. Una afición iniciada por el patriarca de la familia, que ha arrastrado a sus hijos y sobrinos.

El próximo fin de semana se disputará el Campeonato de España de Autocross en Arteixo y cuatro de los cinco miembros de la familia se pondrán al volante de sus coches.

Santiago Ares Fernández

«Los fin de semana nos juntamos todos con los mecánicos y montamos una fiesta». Cuatro veces campeón gallego en la División 1. Fue a ver una carrera a Carballo en el año 84 y en la siguiente ya estaba compitiendo. Fue el culpable de que sus dos hijos sean actualmente pilotos y de que compartan la afición por el automovilismo. «Mis hijos nacieron prácticamente en las carreras», afirma.

Recuerda entre risas como el pequeño de sus hijos ya apuntaba maneras desde bien pequeño. «Estábamos en una carrera en Asturias e Iván tendría 9 o 10 años y le dije en broma: vete al párking cerrado y me traes el coche hasta aquí. Al rato estábamos tomando algo en la cantina y veo el coche en la recta del circuito con las cuatro ruedas en el aire», recuerda.

Santiago Ares Roel

«Nos encanta hacer barbacoas para debatir lo acontecido en las carreras». Tercero en el campeonato gallego y tercer clasificado del Nacional de Carballo. Debutó con dieciséis años en el circuito de Morás (Arteixo). Desde el 2013 se centró en la formación de Antón Muíños, que el año pasado se convirtió en el piloto más joven de la historia en ser Campeón Nacional de Kartcrós.

«Cuando ves a tu padre hacer algo acabas haciéndolo, eso fue lo que nos pasó a mi hermano y a mí», defiende.

Iván Ares Roel

«Soy un loco de las carreras». Es el piloto más laureado de la familia. Actualmente es el que más victorias firmó en el circuito de Morás, además de tener el mejor baremo de triunfos del Campeonato Gallego de Ralis de los últimos tres años. Es a su vez el primer piloto de la historia del automovilismo gallego en proclamarse campeón gallego de ralis de asfalto y de kartcrós en la misma temporada. En su palmarés cuenta con dos subcampeonatos de España, un subcampeonato y tres campeonatos gallegos en autocrós, además de un campeonato y un subcampeonato de España en ralis de asfalto, y dos campeonatos y un subcampeonato Gallego.

Debutó a los catorce años en una carrera de kartcrós en Santa Comba. En ralis, como copiloto de Jesús Pereira.

Su pasión por las carreras era tal, que el día de su estreno tenía como condición impuesta por sus padres aprobar todo. Iván suspendió y decidió falsificar las notas para que le dejaran correr. Le pillaron con las manos en la masa.

«Cuando era pequeño y iba a ver competir a mi padre, solo deseaba que se acabara la carrera. Tenía por costumbre dejarnos subir a mi primo y a mí al coche y nos daba una vuelta en el circuito. Era muy emocionante», recuerda el piloto.

Miguel Suárez Ares

«Con media familia y amigos corriendo, tarde o temprano acabaría al volante». Debutó en 2009 y desde entonces no ha dejado de competir. Durante una carrera de su tío Santi se realizó una manga para mujeres y su madre se atrevió a pilotar un coche de competición. Su padre tenía coches en casa y además él le ayudaba con la mecánica. «Con ese panorama en casa me picaba la curiosidad por este mundo. Teniendo a media familia corriendo, tarde o temprano iba a acabar al volante de un coche de competición», dijo.

«En la familia hay una rivalidad sana, cuando nos juntamos la familia nos vacilamos. Es un cachondeo», asegura.

Jorge Roel Gómez

«Mi sueño sería hacer los que mi tío y mis primos hacen». Es el más joven de la familia y el debutante en esta temporada. Se subirá por primera vez a un kartcrós de forma competitiva en el Nacional de Arteixo. Durante años estuvo siguiendo al equipo en sus desplazamientos, y desde finales de la temporada pasada ayuda y aprende sobre asistencia de equipo en las pruebas de autocrós. Desde la infancia lleva asistiendo a las carreras de sus primos y de su tío. «Cuando iba con mi padre a los coche de choque siempre le decía que no quería estropear el coche como mi primo Santi», comenta entre risas.