Portugal de nuevo en el camino

Xurxo Fernández Fernández
Xurxo Fernández A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

MLADEN ANTONOV | Afp

La selección que lidera Cristiano Ronaldo será el primer y más duro rival del asequible grupo de España en el Mundial de Rusia, en el que también figuran Marruecos e Irán

02 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El vecino tuvo ayer mala suerte. Asomó en cabeza de grupo y le cayó encima el rival más duro del segundo bombo. A Portugal le tocará estrenarse en Rusia frente a España, la selección que le apeó del Mundial del 2010 y de la Eurocopa del 2012. Los compañeros de Cristiano, vigentes campeones continentales con el del Real Madrid como testigo, abrirán su cita planetaria el 15 de junio a las ocho de la tarde. Enfrente estará el combinado que dirige Lopetegui.

Al técnico guipuzcoano le traicionaron las dotes de adivino. Pronosticó un grupo fuerte para su equipo y le ha tocado el que probablemente sea el más sencillo, con permiso de ese que une al anfitrión con Uruguay, Arabia Saudí y Egipto. Además de la escuadra lusa, España se medirá, por este orden, con Irán y Marruecos. Si consigue arrancar por fin ganando (no lo hizo en las dos últimas ediciones), serán los asiáticos que lleva Carlos Queiroz quienes separan a la selección de un fácil acceso a octavos y una plácida última jornada en el grupo B; esta, frente al vecino del sur, recuperado para la competición más importante por el francés Hervé Renard.

La temprana coincidencia con los lusos tuvo un doble efecto balsámico. Por un lado, evitó el emparejamiento con los dos combinados sudamericanos alojados en el bombo 1; los que más opciones tenían de cruzarse en el camino español. Por otro, eliminó de las cábalas al trío de rivales europeos del tercer bombo. Islandia, Suecia y sobre todo Dinamarca podrían haber endurecido mucho la primera fase del torneo. Lo mismo que Serbia en el grupo 4. En este último, la opción de Australia o Panamá pintaba mejor que la marroquí, pero el camino ya parecía bastante transitable a esas alturas del sorteo.

Una ceremonia que alargaron los discursos oficiales y los bailes regionales antes de ir al grano, y que se resolvió sin orquestar ningún grupo de la muerte. En todos ha quedado encajada una selección con aspecto de cenicienta y ninguna de las favoritas va a poder relajarse; al menos, si pretende asegurar un primer cruce más asequible acabando en cabeza.

Ese debería ser el objetivo de España, por mucho que de aquí a la gran cita se empeñe en hacer pasar molinos por gigantes y rebajar su condición de equipo a batir en el B. Portugal, que sufrió para evitar la repesca, será el adversario más duro, y pese a su reciente título en Francia, sigue siendo un conjunto con agujeros.

Para llegar al sorteo tuvo que deshacerse de Suiza en un agónico último duelo de la fase previa. Fue ese el encuentro en el que más dudas despejó, plasmando la fortaleza defensiva que espera esgrimir también como arma en Rusia. Fernando Santos ha construido un grupo a la espera, diseñado para robar y golpear a la contra. Así, sin necesidad de mandar en cada choque, se llevó una Eurocopa; y por esa vía aspira a la proeza planetaria en la que podría ser la última cita a gran nivel de su estrella.

PARA SABER MÁS

Cristiano habrá cumplido 33 cuando el 15 de junio salte al Fisht Stadium de Sochi, encabezando un grupo obsoleto atrás y remozado arriba. A la pareja de centrales más habitual, formada por Pepe (Besiktas) y Fonte (West Ham), le falta algo de chispa producto de la edad (los dos rondan los 35) y prefiere verse arropada y próxima a su área. Por delante, ha irrumpido André Silva, mostrando con su selección unas prestaciones que aún esperan ver en el Milan. Forma junto a William Carvalho, Bernardo Silva, Guedes y los devaluados Renato Sanches y André Gomes el proyecto de futuro de una Portugal que se exige un nuevo salto para encontrar hueco entre los grandes. Por desgracia para el vecino le ha tocado empezar por España.