El C2 500 metros de la canoísta pontevedresa pasa a semifinales tras ahorrar esfuerzos en un día con viento perjudicial para zurdas, como ella y su compañera María Corbera
06 ago 2024 . Actualizado a las 20:48 h.Sopló viento del sur, la racha lateral perjudicial para zurdos en la pista de piragüismo de Vaires-sur-Marne. Y, pese a todo, a la pontevedresa Antía Jácome y la madrileña María Corbera, que empuñan ambas la pala con la mano izquierda, casi les dio igual. Después de una exhibición de poderío alcanzaron su primer objetivo en los Juegos Olímpicos de París 2024: su C2 500 metros accede directamente a la semifinal del viernes, cuando también se disputará la regata por las medallas, sin tener que disputar hoy la repesca de cuartos. Completaron una puesta en escena poderosísima, que compartieron luego e un relato con detalles y anécdotas, garantizando que se habían guardado energías para una semana cargada de regatas, al disputar también, y ya ambas como rivales, el C1 200.
El C2 500 español cubre el medio kilómetro en un tiempo de 1.55.63 que les habría dado el récord olímpico un día antes. Porque solo les supera el descomunal registro de las canadienses, 1.54.16, tras una manga en la que defendieron la plaza ante el ataque de Hungría, que al final cruza la meta más de un segundo por detrás de Jácome y Corbera.
—Antía ha controlado la regata súper bien. Yo iba más sintiendo a las húngaras, que podían acercarse peligrosamente. Pero hemos llegado frescas y contentas.
—Hemos controlado muy bien la regata, aunque María no tanto y llegó al 200 metros y me pegó un grito de «¡sube, por favor!».
—¡Vamos!
—María controla un poco más, siente más cerca a las rivales. Yo voy delante y sabía que no nos iban a remontar, porque además nosotros también podíamos todavía subir.
Así que el tiempo del C2 500 español, mejorado en la otra tanda por el barco chino —el único que les ganó en el Mundial del 2023 en Duisburgo—, también por debajo del anterior récord olímpico, es una referencia relativa, porque no se exprimieron al máximo al verse «ya metidas al paso por los 400 metros».
«María no suele hablarme en medio de la regata y me ha dado un grito. Eso es porque tenía más fuerzas aún», añadió en tono distendido Jácome. «Podemos llegar a un momento más crítico», coincide Corbera. «Tenemos mucho más que dar y lo sacaremos en breve», concluye en el relato a dos voces Jácome, que a sus 23 años aspira a un doble oro en París, un hito que jamás consiguió una deportista española.
Sople por donde sople el viento. «Como lo tenemos muy entrenado, fuimos sin miedo», explica Corbera. «Entrenamos así en Mallorca todos los días. No hay problema», cierra Jácome.
Un día de descanso antes de seguir un exigente programa
Jácome y Corbera no compiten mañana, el jueves lo harán por separado en las series (y quizá los cuartos) en C1 200 y retomarán el C2 500 el viernes, con la semifinal (10.30, TVE) y la posible regata por el podio (12.50, TVE).