Carlos Sainz, el héroe que necesita Ferrari en su última carrera juntos

David Sánchez de Castro

DEPORTES

Rula Rouhana | REUTERS

Norris y Piastri dan a McLaren un doblete inapelable para comandar la parrilla del GP de Abu Dabi, con el madrileño tercero

07 dic 2024 . Actualizado a las 18:06 h.

La lógica apunta a que McLaren conseguirá este domingo el título mundial de constructores. Salen de manera inmejorable en la parrilla del Gran Premio de Abu Dabi, con Lando Norris primero y Oscar Piastri segundo. Además, Charles Leclerc se quedó fuera en la Q2, lo que unido a la sanción de diez posiciones le hace hundirse en la parrilla. Solo Carlos Sainz, tercero, mantiene las esperanzas para Ferrari, que debe remontar 21 puntos frente a la escudería de Woking si quiere llevarse el trofeo por equipos.

Será complicado después de lo visto en la clasificación, donde no faltaron las sorpresas desde el primer momento, como la eliminación de Lewis Hamilton o la clasificación de Valtteri Bottas para la Q3. El finlandés saldrá justo detrás de Fernando Alonso, quien, de nuevo, maximizó las opciones de su Aston Martin. El asturiano Luchará por puntuar y cerrar el año con el mejor sabor de boca posible.

Con una pista que mejoraba conforme se llegaba al final de la sesión, pocos dudaron de que podía ser clave hacer una vuelta competitiva al principio. Ahorrar un juego de neumáticos blandos podía ser crítico para las opciones del resto de la sesión. Carlos Sainz fue, en ese sentido, uno de los más rápidos en marcar una vuelta buena. No quisieron especular con él, toda vez que sabían que sus rivales, los McLaren, no comenzaron muy competitivos. Con Max Verstappen y un sorprendente Sergio Pérez -al que primero le quitaron un tiempo y luego se lo reinstauraron tras comprobar el 'VAR'-, detrás, muchos pilotos tuvieron que estrenar un segundo juego de ruedas para atar un tiempo bueno.

Uno de ellos fue Alonso, que pese a marcar una vuelta buena de inicio a falta de un minuto estaba en serio peligro de eliminación cuando intentó un nuevo giro. La mejoría de pista fue tal que Bottas, otro de los que se despide este año, se vio liderando la tabla de tiempos, aunque luego fue mejorado por Leclerc. Esta fue una sorpresa notable, pero no tanta como ver a Hamilton eliminado.

En su última clasificación con Mercedes, Hamilton se vio afectado por un bolardo que Kevin Magnussen, sin intención, le tiró encima. El danés de Haas se estaba apartando para que pasara el británico, con la mala suerte para el de Mercedes que ese bolardo se quedó enganchado en el suelo del W16 y con este ancla tuvo que dar toda la vuelta. Ni planificándolo le hubiera salido esa jugada, digna del Mario Kart, a Magnussen. Hamilton tendrá que apretar los dientes si quiere despedirse de Mercedes con un buen resultado.

Desastre para Leclerc y aviso de Sainz En una Q2 muy igualada, cualquier detalle podía determinar quién pasara a la Q3. Prueba de ello es que Bottas pasó el corte al 'top 10' (por segunda vez este año), o que Leclerc, que aspira al subcampeonato y a ayudar a Ferrari al título de constructores, saldrá último. Y es que a los diez puestos de la penalización por estrenar su tercera batería de la temporada se unió una mala vuelta en la que sobrepasó los límites de la pista. Una salida en la curva 1 por escasos centímetros, no más de cinco, hizo que los comisarios le arrebataran el crono y, con ello, el paso a la Q3. Lo bueno, que Leclerc podrá estrenar todo lo que quiera y salir desde el 'pitlane' y buscar una machada, algo que no se puede descartar visto el ritmo dubitativo de los McLaren.

Carlos Sainz, en su última clasificación con Ferrari, demostró que quiere despedirse a lo grande de los coches rojos. Con el mejor crono de la Q2 mandó un aviso a todos: quería esta pole final de 2024. Pasó cómodo a una Q3 en la que también estuvo Alonso, que por la mañana -quizá como compensación por su rajada del viernes, cuando calificó el AMR24 de peor coche de la historia- afirmaba que tenía buenas sensaciones para este sábado.

Se veía venir desde el viernes: el ritmo de los McLaren, si querían, era muy bueno. Toda vez que, además, en las tandas anteriores no habían apretado con neumáticos nuevos, a nadie le debería haber sorprendido el colosal doblete que marcaron al final. Fue en el segundo intento, porque en el primero el más rápido fue Verstappen, con susto incluido. El neerlandés salvó un accidente serio al saber controlar con maestría su Red Bull, cuya trasera se despendoló a la entrada de la última curva del circuito, la de la recta de meta. Verstappen, sin ese error, quizá habría sido 'poleman' en la última carrera del año.

Pero no. El tetracampeón saldrá quinto. Era el turno de Norris, que vio cómo su compañero ejercía de perfecto escudero y marcaba el segundo crono de la Q3, superando por poco a Sainz, convertido en la última esperanza de Ferrari. Con Leclerc saliendo desde el fondo de la parrilla o desde el 'pitlane', como es previsible, el madrileño es el único que puede evitar que la fiesta del campeonato del mundo de constructores sea para los de Woking. No será fácil, ya que salvo fallo de Norris -que solo ha convertido en victorias dos de las ocho poles logradas este año- y de Piastri, el título se irá para Gran Bretaña.

Por detrás, en una óptima octava posición partirá Alonso, que tratará de contener al inesperado Bottas y a Sergio Pérez, que se quedó con una mejorable (como casi todos sus resultados) décima plaza en parrilla.