Con las bajas de Lima y Scrubb, Lundqvist, Huskic y Diagne apuntan a ser fundamentales para los planes de Epifanio contra el Joventut este domingo
21 dic 2024 . Actualizado a las 05:00 h.Con las bajas de Augusto Lima y Philip Scrubb, teóricos titulares, como telón de fondo, el Leyma Básquet Coruña afronta este mediodía ante el Joventut (12.30 horas, Movistar Deportes) la reedición de una prueba que pasó con nota el pasado fin de semana en Fontajau: la adaptación.
Sin embargo, a la ya sensible baja del veterano pívot brasileño se suma la ausencia del escolta canadiense. Pese a no estar siendo tan productivo a nivel estadístico, Scrubb es una de las piezas claves en el dibujo exterior de Diego Epifanio. El propio míster no descarta refuerzos, pero apela a que los 13 que forman parte de la plantilla desde el inicio de temporada den un paso adelante. «Contra el Girona y durante la semana hemos probado cosas, pero los jugadores tendrán que ser conscientes de que les toca dar un paso adelante», señalaba el técnico.
Y es que varios de los héroes naranjas del ascenso desde la LEB Oro a la Liga Endesa ya dejaron visos en el duelo ante el cuadro gerundense de lo que son capaces de hacer en la pista. Entre ellos, los que acapararon todas las miradas, Goran Huskic, Olle Lundqvist y Atoumane Diagne.
El contratiempo que supuso perder a Lima hasta el 2025 obligó a Huskic y Diagne, segundo y tercer pívot en los planes de Diego Epifanio, a mostrar por qué merecen estar en un equipo de la Liga Endesa.
El serbio, que ya había cuajado un buen partido ante el Manresa pese a la derrota, respondió en Fontajau con un excepcional doble doble, como los que deleitaron al público de O Forno de Riazor en la histórica campaña del ascenso. Se quedó a cinco asistencias de lograr el triple doble.
El gigante senegalés, por otro lado, supo explotar al máximo sus virtudes. Fue el tercer máximo anotador del Leyma Coruña ante la escuadra gerundense con 13 puntos. La cifra de por sí sería llamativa teniendo en cuenta los guarismos habituales de Diagne, pero se magnifica al descubrir que no falló ninguno de los tiros de los que dispuso. Además, cerró la faena con cuatro mates y un tapón, marca de la casa.
El caso de Lundqvist es, quizás, el más sorprendente. El alero sueco, que también se puede desarrollar de escolta, cuajó su mejor partido desde su regreso. Estuvo 29 minutos en pista en Fontajau (el que más del equipo naranja), principalmente jugando de dos, y anotó 16 puntos y repartió dos asistencias. Cabe recordar que, como en el caso de Trey Thompkins, Olle tuvo su pretemporada particular durante la rehabilitación tras la operación a la que se sometió pocos días después de que el Leyma Coruña ascendiese en Melilla.
Epi tiene claras sus opciones y sabe que, a falta de fichajes, el núcleo duro que llevó a los naranjas a la élite del baloncesto español lleva a flor de piel el escudo: «Somos una plantilla de 13 más los tres vinculados y vamos a sacar el partido adelante con ellos».