Thomas Heurtel, jugador del Leyma Básquet Coruña: «Me he encontrado a un equipo que está enfocado en sacar adelante esta situación»
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El base francés, con pasado en clubes como el Baskonia, el Real Madrid y el Barcelona, describe el vestuario del cuadro naranja como uno de los mejores de los que ha formado parte
12 feb 2025 . Actualizado a las 15:57 h.Con apenas un mes y tres partidos a sus espaldas, Thomas Heurtel (Béziers, Francia, 1989) ya se ha convertido en un baluarte del Leyma Básquet Coruña. El exjugador de equipos como el Real Madrid, el Barcelona y el Baskonia emergió como estrella naranja en el duelo contra el Joventut en Badalona, que finalmente cayó del lado local en medio de suspicacias arbitrales. Heurtel, que poco a poco entra en dinámica, desgrana sus primeras semanas en el club herculino.
—Lleva poco más de un mes en A Coruña. ¿Cómo se ha adaptado a la ciudad?
—Creo que me estoy adaptando bastante bien. Es una ciudad muy bonita. Nos gusta mucho; eso sí, mucho más cuando hace sol que cuando llueve y hace viento [se ríe]. Por el momento, estamos encantados con A Coruña.
—¿Qué tal está llevando estas semanas de trabajo para estar a su máximo nivel?
—Lo estoy llevando bien. Me toca hacer mucho trabajo de gimnasio, muchos tratamientos... Y realmente, poco más. He entrenado poco con el resto de los compañeros, la próxima semana ya espero estar con ellos, en dinámica de grupo. La idea es esa, completar todas las sesiones y ser uno más.
—Viene de jugar en la liga china. ¿Cómo se está adaptando de nuevo a la Liga Endesa?
—Visto lo visto en el último partido, yo creo que bien, ¿no? [se ríe]. Para mí, nada ha cambiado demasiado respecto a las otras etapas. Lo único, que ahora estoy en un equipo diferente que tiene una situación concreta. Creo que no voy a tener demasiados problemas para poder desplegar mi juego.
—¿Qué opina del vestuario? ¿Ha entablado ya relación con compañeros?
—Después de un mes, sí, obviamente. La verdad es que hay un gran vestuario. Son buenos chicos, el club en general es muy familiar. Lo más importante es que estamos todos en la misma página y queremos sacar adelante esta situación para salvar al equipo. Es uno de los mejores vestuarios de los que he formado parte. Aparte de Trey, me llevo en general muy bien con todos. Hablo mucho con Atou, Gus Lima, Ingus, Brandon, Goran... A Aleix y a Álex Hernández los conocía también de Barcelona. Álex me ayudó mucho cuando llegué. Ejerce su rol de capitán de una forma maravillosa. Todos nos llevamos muy bien.
—¿Cómo es su relación con el míster, Diego Epifanio?
—Pues muy buena. Hablamos mucho. Desde el principio hemos intentado y vamos a seguir intentando jugar de la mejor manera para ganar partidos y mantener al equipo donde se merece estar.
—¿Ha sentido una buena acogida de la afición desde su llegada?
—Sí, sin duda, estoy encantado con el cariño de la gente. Desde el minuto me han apoyado después de todo, y se lo agradezco muchísimo. Estoy gratamente sorprendido con la acogida. De vez en cuando la gente me reconoce por la calle, me apoyan, me saludan... Intento siempre pararme y tomarme el tiempo para hablar con ellos y sacarnos una foto si quieren.
—En el partido contra el Joventut repartió 18 asistencias, su mejor marca histórica y la segunda mejor de la historia de la competición. ¿A qué atribuye este gran rendimiento?
—Yo creo que responde a que jugamos un gran partido. Obviamente, una asistencia es una cosa de dos, el que da el pase y el que mete la canasta. Hicimos un buen encuentro en lo colectivo y salió así. Hay que seguir así. Infelizmente, estaba más triste por el tiro que contento por las asistencias. Yo sé cuáles son mis cualidades y de lo que soy capaz, pero me dio mucha pena que se nos escapase el partido.
—Llamó la atención la dupla que protagonizó junto a Atou Diagne...
—Sí, a Atou lo conozco desde Barcelona, entrenaba a menudo con nosotros. Con él, con Goran y con Lima me entiendo muy bien. Durante toda mi carrera he conseguido buenas uniones sobre la pista con los pívots.
—Actualmente, la situación del equipo es complicada, aunque la salvación sigue a dos victorias. ¿Qué cree que necesita el equipo para salir adelante?
—La clave, para mí, es luchar hasta el final, tal y como hicimos en Badalona. Si continuamos con esta actitud y el nivel de juego que estamos desplegando, tengo claro que podremos ganar bastantes partidos. No tengo ninguna duda de que las victorias van a llegar.
«Quiero agradecer a la afición su apoyo desde el primer momento»
—¿Cómo se prepara mentalmente para los partidos? ¿Tiene alguna rutina?
—Supersticiones, como tal, no tengo ninguna. Lo que sí que hago siempre antes de salir a los partidos es centrarme en mí mismo. Hago una pequeña oración para fijarme mis objetivos para el partido, qué tengo que hacer y qué no, y pido protección contra las lesiones. Más allá de eso, no tengo nada como atarme primero una zapatilla o beber con la mano izquierda [se ríe].
—Ha jugado en clubes como el Baskonia, el Barcelona, el Real Madrid y el Efes. ¿Qué recuerdos guarda de su paso por estos clubes y qué ha aprendido de sus entrenadores y compañeros?
—Hay un poco de todo, en algunos tengo mejores recuerdos que en otros. En general, mi carrera ha tenido de todo. Altibajos, momentos positivos y negativos... Siento que, en ocasiones, pude haberlo hecho mejor. Pero, definitivamente, también guardo buenos recuerdos de algunas de esas etapas.
—¿Cómo ha gestionado los momentos malos en su carrera para poder estar en la posición en la que se encuentra actualmente?
—Sobre todo, mi mujer. Siento que ella es de las personas que más me ha ayudado a salir adelante. Siempre ha sido como mi psicóloga. Igualmente, en el deporte y en la vida hay momentos duros y momentos muy bonitos. Lo más importante es entender que todo forma parte del juego.
—¿Qué consejos le daría a los jóvenes que aspiran a convertirse en jugadores profesionales de baloncesto?
—Lo principal es que no se coman la cabeza. Lo más importante es que disfruten de jugar al baloncesto, que no miren tanto las redes sociales y quieran ser Michael Jordan. Jugar mucho es una buena señal, indica que estás apasionado por lo que haces, y la pasión es el motor que te lleva a estar unos pasitos más adelante y poder ser profesional.
—¿Qué significa el baloncesto para usted? ¿Es solo un trabajo o va más allá?
—Va más allá para mí, sin duda. Me encanta el baloncesto, es mi pasión. Veo muchos partidos, me gusta descubrir y conocer jugadores... Quizás en unos años, cuando me retire como profesional, siga vinculado a este mundillo. Nunca se sabe, pero me encantaría poder seguir ligado a este deporte.
—¿Qué hace en su tiempo libre cuando no está jugando o entrenando?
—Soy un tipo tranquilo. No tengo ninguna afición más allá de lo que es mi vida, que es estar con mi familia. Intentamos disfrutar al máximo y cuidar de los niños de la mejor manera.
—¿Qué mensaje tiene para los aficionados del Leyma Coruña?
—El mensaje es el típico; lo primero es agradecerles que vengan al pabellón a animarnos y pedirles que no se bajen de ese barco, que nos sigan ayudando como lo han hecho desde el minuto uno. Quiero agradecerles de verdad que me hayan abrazado desde el primer momento, y que sepan que vamos a darlo todo para intentar sacar adelante esta situación.