El Leyma Básquet Coruña gana al Lleida y mantiene viva la esperanza (97-84)

DEPORTES

Ilusionante victoria del cuadro naranja ante un rival directo por la permanencia en la Liga Endesa, en un encuentro intenso y con altibajos

01 mar 2025 . Actualizado a las 20:05 h.

Quinta victoria del Leyma Coruña en la Liga Endesa, en un ilusionante encuentro ante el Lleida, que mantiene viva la esperanza para la parroquia naranja de permanecer una temporada más en la ACB. La próxima cita será el domingo 9 (12.30 horas, Movistar +) en la cancha del Manresa. Atacó como es habitual el cuadro coruñés y supo gestionar sus lagunas defensivas en los peores momentos.

Se trataba de un partido clave para las aspiraciones del Leyma, ante un rival directo. Bajo esa premisa, el Básquet Coruña salió frente al Lleida en un Coliseum con las gradas casi repletas y ambiente de carnaval. La intensidad se trasladó a la cancha y el cuadro naranja apostó por lo que mejor sabe hacer: dominar el encuentro desde el ataque.

Ejerció una posesión efectiva con un elevado ritmo, que sirvió para sacar del parqué a un Lleida tímido, incapaz de contener el vendaval que generaban las muñecas de Thompkins y Taylor. Aunque el duelo comenzó con un intercambio de triples, pronto los dos americanos se hicieron con la manija y el Lleida apenas podía responder con un movimiento de balón en el perímetro que solo era dañino cuando el Leyma se descentraba en defensa.

Barrueta desde la línea de 6,75 y Huskic con sus penetraciones afianzaban un marcador que llegó al final del primer cuarto con un claro 31-18. La presencia de Heurtel en el segundo tramno de esta primera entrega sirvió para confirmar que la profundidad de banquillo será clave en la permanencia del Básquet Coruña en la Liga Endesa.

En el segundo cuarto, el Lleida dio con uno de los puntos débiles del equipo coruñés, apretó en su defensa y aprovechó las desconexiones en la del cuadro naranja. Un parcial de 5-20 en medio cuarto desató la incomodidad en la grada y en el equipo. El 36-33 más las faltas cometidas introducían al Leyma en un terreno peligroso. Epifanio movió ficha, pidió tiempo muerto a falta de 4.07 y el plantel captó el mensaje. Al regreso, de nuevo, el caudal ofensivo naranja fue determinante para que las aguas volviesen a su cauce. La lectura del partido era clara: el Leyma lo controlaba en tanto el ataque funcionaba, porque en defensa las lagunas eran demasiado lastrantes. Al descanso se llegó con un tranquilizador 52-42.

Y tras él, ambos contendientes salieron conscientes de que era el momento decisivo del enfrentamiento. Por eso, al mate de Thompkins respondió el Lleida con un par de triples mal defendidos, ante la desesperación de Epifanio. De hecho, la falta de concentración defensiva provocó que el marcador se apretase hasta el 56-50 al filo del ecuador del tercer cuarto.

El Leyma siguió apostando por el lanzamiento de larga distancia en este tramo del duelo, con la excepción de la nueva conexión Heurtel-Huskic para el juego combinativo. A falta de Diagne, el francés buscaba una segunda lectura, de la que se beneficiaba también Burjanadze (y el público, porque la plasticidad de sus asistencias bien merece la entrada). A fin de cuentas, el peso de Heurtel en el tramo final del duelo sirvió para que el Lleida asumiese que su remontada era imposible.