El Athletic traslada a la Liga y la Federación que vigilará los movimientos económicos del Barcelona
DEPORTES

El presidente Uriarte y el director general Berasategi viajan a Madrid por un tema de la Liga F y aprovechan para comunicar a ambas entidades que estarán muy atentos al «fair play» financiero azulgrana
25 jun 2025 . Actualizado a las 20:11 h.El presidente del Athletic, Jon Uriarte, y el director general rojiblanco, Jon Berasategi, viajaron a Madrid con motivo de una reunión relativa a la Liga F y aprovecharon su presencia en la capital de España para comunicar a la Federación Española de Fútbol (RFEF) y a la Liga que vigilarán muy de cerca todas las operaciones económicas del Barcelona.
De esta manera, según informó la Cadena SER, pretenden fiscalizar cada paso financiero de los culés en el «caso Nico Williams», quien ya ha trasladado su deseo de vestir de azulgrana. Los rectores de la entidad bilbaína están decididos a proteger sus derechos y exigir que los catalanes se ajusten a las reglas, porque el propio Javier Tebas, presidente de la Liga, había comentado hace unos días que a los culés aún les falta para estar dentro de la regla 1:1. ¿Esto qué quiere decir? Es la norma que regula la inversión de cada euro ingresado en fichajes y que los azulgranas no han podido cumplir para las inscripciones en más de un tramo de la pasada campaña.
El Athletic cree que el Barça no cumple con los principios del «fair play» financiero y considera que la Liga no debería siquiera permitir la ejecución de la cláusula de Nico Williams —de 58 millones más el IPC, lo que la dejaría en 62— mientras no cumpla con la legalidad vigente. Más allá de mantenerse firme en su determinación de no negociar con los azulgrana -el club bilbaíno jamás habla de la venta de sus jugadores- y demandar el abono íntegro del blindaje, sin ninguna posibilidad de aceptar pagos a plazos, los rojiblancos han considerado necesario levantar la voz para que se les escuche en la RFEF y la Liga.
Monitorizar los movimientos
Nico Williams tiene cerrado un acuerdo con el club azulgrana por seis temporadas a cambio de siete u ocho millones anuales netos, además de los generosos bonus que reparte el conjunto culé en función de los objetivos cumplidos. El trato se selló después de una reunión del director deportivo del Barcelona, Deco, con Tainta en un hotel de la Ciudad Condal hace un par de semanas. El agente lo negó y luego el propio Deco lo confirmó en una entrevista con La Vanguardia.
Después hubo un viaje relámpago del brasileño para entrevistarse con el extremo en Ibiza, donde pasaba unos días de vacaciones, cerca de donde tiene su residencia veraniega Hansi Flick. En su desplazamiento le acompañaron su ayudante Bojan Krkic y Alejandro Echevarría, excuñado de Joan Laporta, un hombre con mucha ascendencia en la junta del Barça a pesar de que no tiene ningún cargo. Era otro paso más en una operación que lleva fraguándose más de un año y está a punto de cristalizar en un traspaso.
Apenas dos días después que Deco dijera públicamente que Nico «quiere venir», Tainta trasladó a Ibaigane lo que ya sabía: que el pequeño de los hermanos quiere vestir de azulgrana. El Athletic sigue en su sitio y se muestra firme en su decisión de exigir la cláusula y pedir a la Liga que vele por el cumplimiento de las reglas financieras.
En cualquier caso, el adiós del extremo está cada vez más cerca y puede sentirse casi físicamente, como el hartazgo de la afición rojiblanca, deseosa de que el culebrón termine. Faltan dos semanas para que la plantilla vuelva a los entrenamientos en Lezama, donde, salvo sorpresa mayúscula, solo romperá a sudar uno de los Williams. El capitán. Mientras tanto, el Athletic estará atento a cada euro que mueva el Barça y piense en invertirlo en la compra de futbolistas.