
El piloto español consigue su victoria 68 en moto GP e iguala los triunfos de Giacomo Agostini en la categoría reina
29 jun 2025 . Actualizado a las 17:16 h.La victoria número 68 de Marc Márquez en la categoría reina del motociclismo no fue un triunfo más. Con esa cifra igualaba al mito Giacomo Agostini, el piloto con más campeonatos del mundo de la historia (15) y ya solo tiene por delante en el palmarés a Valentino Rossi, que logró 89.
No hacía falta que volviera a ganar para saber que Márquez es una leyenda viva del motociclismo y que, a este ritmo y con 32 años, puede convertirse en el más grande de todos los tiempos. Sesenta y ocho son también los puntos de ventaja que tiene ahora el líder de la general con respecto a su hermano Álex, sin duda la cruz del domingo en Assen, que sale con cero puntos y con una lesión en el dedo índice de la mano izquierda.
Una información que recibió Marc en el mismo parque cerrado del podio y que le hizo torcer el gesto en un momento de euforia. «Estoy muy contento, pero no al cien por cien porque mi padre me ha dicho que Álex se ha lesionado. Él es mi principal rival por el campeonato, pero quiero a mis rivales en la pista, sobre todo si es mi hermano, así que le ayudaré a recuperarse», señaló.
En la salida, el poleman Fabio Quartararo se quedó clavado y vio como las Ducati de Pecco Bagnaia, Marc y Álex Márquez les pasaban por encima. Y justo al inicio de la segunda vuelta, lo hacía Marco Bezzecchi, otro de los que a la postre serían protagonistas de la carrera.
También aparecía en esas primeras posiciones Pedro Acosta, que firmaría su mejor carrera del año en Assen. Bagnaia lideró la carrera durante las cuatro primeras vueltas, hasta que llegó el hachazo de Marc en la quinta. Y ya no volvería a soltar la cabeza del grupo.
El de Cervera gestionó la carrera a su antojo, justo como lo había planeado antes de empezar. «Hoy he ganado sin ser el más rápido, simplemente gestionando la carrera como tocaba. Esta era una de las cosas que me costaba en el pasado, saber gestionar los tiempos de la carrera. Ponerme líder y marcar mi ritmo, como he hecho hoy. Marcando mis vueltas personales al final porque cuando empiezan a caer los neumáticos es cuando más cómodo me encuentro», explicaba el líder destacado del campeonato.
Durante la mayor parte de la carrera, Márquez mantuvo a raya a Bezzecchi, una vez que el italiano pasó a su compatriota en la octava vuelta, pero como había ocurrido el sábado en el esprint, cuando el que estuvo todas las vueltas pegado a su espalda fue su hermano Álex, el de Aprilia tampoco encontró en ningún momento el hueco para pasar y el tirón que dio en las últimas tres vueltas le dejó ya sin opciones, en una de las mayores exhibiciones de una carrera sin un solo error del piloto de Cervera.
Cara y cruz
Fue un domingo con muchos incidentes en el rapidísimo trazado neerlandés, donde varios pilotos terminaron en el centro médico tras varias caídas. Dos de ellas llegaron en la misma vuelta, la sexta. Por delante Álex Márquez, que estaba protagonizando una intensa batalla por la cuarta posición con Pedro Acosta, se fue al suelo a más de 200 km/h, después de que la KTM del murciano tocase la maneta de freno de la Ducati del catalán y este impactase violentamente contra el suelo.
Un golpe que le mandó directamente al centro médico, donde le detectaron la fractura del dedo, que le inmovilizaban de inmediato. Pocos segundos después, los que se iban al suelo eran Fermín Aldeguer y Joan Mir, que eran noveno y décimo, y que también tuvieron que acabar en la clínica del circuito.
Se le vio muy activo a Acosta en esa primera parte de la carrera, en la que llegó a situarse en posición de podio, tras adelantar a Bagnaia, pero el italiano le devolvió al cuarto puesto cinco vueltas después y en la última parte de la carrera no pudo ya seguir el ritmo de los tres primeros. El bajón de rendimiento final tenía una explicación y es que al murciano le picó una avispa a diez vueltas del final que le provocó una reacción alérgica. Y nada más terminar la carrera fue directamente al hospital de Assen para controlar su estado.
Una situación que convertía en más valioso aún su cuarta posición. No hubo más movimiento en el tramo final de la carrera, donde Marc Márquez consolidó su sexta victoria del año en domingo, por delante de Bezzecchi y de Bagnaia, que volvió a acabar en el tercer escalón del podio, lo que no le hizo especialmente feliz. «No es suficiente un tercer puesto. Estamos en el mismo sitio que siempre. La única diferencia es que en las dos últimas carreras he luchado un poco en la parte inicial, pero al final nunca he podido luchar por la victoria», manifestó.
El italiano prácticamente ha dicho adiós a sus opciones de título, a 128 puntos de su compañero de equipo. Maverick Viñales acabó en la quinta posición, batiendo a las Ducati de Fabio Di Giannantonio y Franco Morbidelli, que volvió a ser sancionado con una vuelta larga después de un incidente con su compañero de equipo en la chicane. El octavo fue Raúl Fernández, mientras que Quartararo, que se vio inmerso en el accidente de Aldeguer y Mir, terminó décimo y Álex Rins, decimotercero. El tailandés Somkiat Chantra superó en la última vuelta a Aleix Espargaró para esquivar la última posición a la que parecía abonado y conseguir su primer punto y el primero también para el país asiático en la clase reina de moto GP.