Toño Zobra y Manuel Espiña ejercerán de coordinadores, y David Rivero de entrenador El conjunto dezano se presentará mañana y contará con un filial nutrido de canteranos y veteranos del club
21 ago 2002 . Actualizado a las 07:00 h.A El Guerra Lalín presenta mañana a su equipo de Primera Nacional a las 21.00 horas en el Cortizo. Frente a lo que suele ser habitual, la plantilla no será en esta ocasión la protagonista del evento. Y es que las grandes novedades llegan este año del cuerpo técnico. Los problemas de Toño Zobra para compaginar la temporada pasada sus obligaciones laborales con sus compromisos en el banquillo del Lalín han llevado al club a poner el primer equipo en manos de un triunvirato . Manuel Espiña, el propio Zobra y David Rivero, preparador del conjunto juvenil y jugador del cuadro de Primera Regional en la última campaña, son los nuevos responsables deportivos del conjunto dezano. Los dos primeros, como coordinadores técnicos encargados de la planificación del trabajo de la plantilla. Rivero, como entrenador. Labor que desempeñará con la colaboración estrecha y permanente de Espiña. Cada dos semanas, los tres se reunirán para hacer un seguimiento del desarrollo de la planificación deportiva hecha a principios de temporada y retocarla si así fuera necesario. Una tarea de la que se encargarán fundamentalmente Rivero y Espiña, dejando a Zobra el cometido de la coordinación del resto de los equipos con los que cuenta el Guerra Lalín. Respecto a este último punto, la entidad dezana ha decidido montar un filial que jugará en la Segunda División Autonómica a las órdenes de José Jordedo. La intención del club, explicó ayer Zobra, es contar «cunha plataforma para os rapaces que rematan a súa etapa xuvenil, na que poidan ir collendo experiencia antes de dá-lo salto ó primeiro equipo, e para aqueles veteranos que queren tomarse o rugbi con máis calma». El Guerra cuenta con poder presentar su filial a finales de este mes o principios del próximo. David López, en el equipo juvenil, y los repetidores Manuel Iglesias, en el femenino, y Mónica Montoto, en el cadete, completan los banquillos del Lalín.