El sector lácteo vive hoy otra jornada con incertidumbres. A las cinco está convocada la Mesa do Leite. Entre los propios integrantes queda la incertidumbre no de resultados sino de que incluso llegue a celebrarse. Los antecedentes dan credibilidad la existencia de dudas, están en la reunión de Madrid cuando no hubo presencia de la industria.
Ayer las organizaciones agrarias abrieron otra vía de acción: empapelar cisternas de leche poniendo a circular sus mensajes en camiones que transportan producto de firmas criticadas. Esta medida y otras de empapelado urbano que ya se vienen realizando están a punto de llegar a la zona. Es inminente que se escenifique en la Comarca de Deza esta campaña de boicot a ocho marcas de las firmas Río Celta y Lactalis, aunque las organizaciones no van avanzando fechas de acción.
Lactalis iguala precio a Puleva
Precisamente en el sector se están moviendo cosas. Ya se había avanzado subidas de la leche para la producción de agosto y para la de septiembre. Se había anunciado en niveles mínimos y así va trascendiendo. Lactalis habría subido media peseta en el producto de agosto y subirá algo más de una y media en el de septiembre. Se sitúa este incremento en un ajuste a los precios que tiene Puleva, empresa que la adquirió, y parece razonable que operen en el mercado ya con los mismos precios. El valor podría situarse con precio total sin IVA sobre los 29 céntimos de euro, según estimaciones sectoriales.
Precisamente sobre las subida de Lactalis se pronunció en Asturias el responsable comarcal de Unións Agrarias, Román Santalla, destacando el alza y calificándola de insuficiente pero ya con un lenguaje critico más dirigido a Celta y Río. No obstante las organizaciones mantienen las tres firmas en el objetivo de boicot del consumidor.