Los rojillos encadenan diez triunfos consecutivos, como en su día el Compos
14 nov 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Estradense está dispuesto a pulverizar nuevos récords ya en el ámbito gallego tras conseguirlo en la propia historia del club. Los rojillos encadenaron ante el Erizana su décima victoria consecutiva e iguala la cifra cosechada en su día por la SD Compostela, circunscribiéndose a la categoría de Regional Preferente. El técnico, Alberto Mariano, resaltaba ayer esta circunstancia aunque apelaba «a poner por mi parte un punto de cordura y calma ante tanta efusión como se vive en el seno de la entidad por esta racha de triunfos». Eso sí compartía la alegría que se vive en todos los estamentos de la institución, desde directiva a cuerpo técnico, plantilla y aficionados.
La plácida goleada del domingo marcó un hito en los más de noventa años de historia rojilla. Pero además les convierte en líderes no solo de la clasificación sino también con más claridad en el apartado de goles a favor, con 38 en trece jornadas, así como en la de tantos encajados, tan solo doce. Pese a unas cifras estratosféricas a estas alturas de temporada, la igualdad en la parte alta sigue. Lo ejemplificaba el propio Mariano con dos datos: con esta progresión el tercero tendría al final de liga 79 puntos, casi los mismos de quien ganó en la campaña 2016-2017; y que dos derrotas seguidas del Estradense con victorias de ese tercero, el Bande, les dejaría fuera de puesto de ascenso siempre que no pinchase el UD Ourense.
«Los cinco primeros vamos a un ritmo altísimo de puntuación y va a ser una liga complicada, pero tenemos que estar contentos porque no esperábamos estar ahí y seguir con la máxima ilusión», significó el entrenador del Estradense. La nota negativa ante el Erizana fue la lesión de Carballa, en principio un fuerte esguince en un tobillo en espera de una exploración médica, pero que al menos le apartará tres o cuatro semanas. Mientras, regresan a los entrenamientos Santi y Arturo.
El gol de penalti en el primer minuto facilitó el desarrollo del choque, reconocía ayer Mariano, al cambiar el planteamiento el rival y subir algo sus líneas aunque sin crear peligro. La puntilla fue el «golazo de Jorge, que se sacó de donde no se podía sacar; estuvimos muy efectivos». Esa undécima victoria histórica se dirimirá el próximo domingo en una salida complicada a Campo Lameiro, recién ascendido pero con un grupo compacto y que en casa muestra su fortaleza.