«Como residuo es muy malo, pero tiene una segunda vida es el ejemplo perfecto de economía circular»
DEZA
L os aceites industriales reúnen todos los ingredientes para convertirse en una auténtica bomba en contacto directo con la naturaleza, «porque tienen sustancias tóxicas, metales pesados que si caen en el agua, se infiltran en la tierra o se queman pueden tener consecuencias muy graves», alerta Alberto Carmona, miembro del equipo de comunicación de Sigaus. Sin embargo, tratados de forma correcta pueden ser muy útiles, porque es un material del que se aprovecha el 100 %.
«Como residuo es muy malo, pero tiene una segunda vida y es el ejemplo perfecto de economía circular», destaca, para luego apuntar que si se recicla «es muy valioso». Señala que se puede convertir en una base lubricante que es el componente de nuevos aceites industriales, o en fuel tradicional, que se emplea en hornos, instalaciones industriales o centrales térmicas. «En lugar de utilizar productos que llevan petróleo, se pueden utilizar estos que se consiguen a través de los aceites industriales reciclados, lo que los convierte en una materia prima muy importante», insiste.