Deza atenúa la hemorragia de vecinos, pero se intensifica en Tabeirós-Montes

Javier Benito
JAVIER BENITO LALÍN, A ESTRADA / LA VOZ

DEZA

E CUIÑA

Lalín logra subir población en el primer semestre del 2024, pero baja en A Estrada y coquetea con caer por debajo del escalón de 20.000 habitantes

25 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La brecha demográfica en la que se hunde año a año el norte de la provincia pontevedresa tampoco se logro logró cerrar en el primer semestre del 2024. Acaba de conocerse el informe de población elaborado por el Instituto Galego de Estatística (IGE) y se puede constatar la continuidad en el constante descenso de habitantes que padecen Deza y Tabeirós-Terra de Montes. Pero todo con matices, aunque la realidad es que se bajo en 78 residentes en la zona, desde los 62.973 a los 62.895 que suman los ocho municipios, seis dezanos además de A Estrada y Forcarei.

La evolución de las dos comarcas en ese período resulto distinta, puesto que en Deza sí aumentó la cifra de habitantes, en concreto en 66, al saltar de 39.696 a 39.762. De esa forma logró atenuar la hemorragia de vecinos en espera de cómo acabó el 2024 y de que se haga público por el Instituto Nacional de Estadística (INE) el censo a 1 de enero del 2025. La otra cara de la moneda la protagonizaba Tabeirós-Terra de Montes, que se dejaba la nada desdeñable cifra de 144 habitantes en un solo semestre, pasando de 23.277 a 23.133.

El incremento poblacional en Deza fue positiva, aunque apenas supone un 0,1 % más en la comparativa. Pero figura entre las dieciocho comarcas gallegas que sí vieron aumentada su cifra de habitantes entre enero y julio del pasado año. Un aumento testimonial que fue del 0,17 %, situándose la undécima entre esas comarcas al alza, superando a Ordes, Lugo, Vigo, Terra de Celanova, Ourense, Meira o A Mariña Central. Por encima destacó Betanzos, junto con A Mariña Oriental, Ferrol, Santiago, A Coruña, O Condado, Viana, Bergantiños, Allariz-Maceda y Pontevedra.

Subida elevada en Silleda

Respecto a los municipios dezanos, hubo incremento en cuatro de ellos —Lalín, Silleda, Vila de Cruces y Rodeiro— y se bajó en otros dos, es decir, Agolada y Dozón. Sin duda destacó el estirón que se constató en ese semestre en el concello trasdezano, con 124 habitantes más según el informe del IGE hecho público ayer. Ya roza Silleda el techo de los 9.000 residentes, mientras que Lalín subió en 80, para situarse en 20.330 y mantenerse vivos por encima del listón que marca la pérdida de categoría.

Vila de Cruces creció en 13 pero tiene todavía cerca la espada de Damocles de perder los 5.000, con los 5.044 a julio del 2024. Rodeiro subió de forma simbólica en 4, hasta 2.280. Por su parte, Agolada bajó de forma alarmante con 63 habitantes menos, cayendo a los 2.224 y ya por debajo de Rodeiro en población. Por último, Dozón sigue sin controlar la sangría de residentes y se dejó 15 en solo seis meses, quedando en 959. Con esos números, si no logra remontar antes del 2027, perderá la categoría con la consiguiente reducción de integrantes de la corporación.

En la otra comarca, Tabeirós-Terra de Montes, ninguno de sus dos municipios consiguió aumentar habitantes entre enero y julio del 2024. Y en ambos casos se acercan a abismos importantes, en especial en el caso de A Estrada. Quedó en 20.080 residentes tras dejarse 53 en ese período. De esta forma peligra que puedan mantener la categoría, porque cada vez están más cerca de ese listón de los 20.000. Si finalmente ocurre perdería el Concello el control y gestión de diversos servicios municipales que ahora presta, además de la caída de ingresos.

En Forcarei están en riesgo los 3.000 vecinos, porque se dejó la importante cifra de 92 en solo seis meses. En su caso está ahora en 3.052.