




El incendio quedó estabilizado por la noche tras calcinar 400 hectáreas
14 ago 2025 . Actualizado a las 14:23 h.Todavía con el susto en el cuerpo, los vecinos de O Castro trataban de volver a la normalidad después de que el fuego que todavía afecta a Dozón estuviese a punto de alcanzar las viviendas, explotaciones ganaderas y comercios de la localidad. Una tarea difícil a la vista del desolador panorama que dejó tras de sí el incendio, con un paisaje donde el humo y la ceniza son protagonistas. Afortunadamente no hubo que lamentar daños personales ni materiales de consideración.
Uno de los momentos de mayor tensión se vivió junto a la gasolinera de la localidad, que quedó a merced de las llamas. El encomiable esfuerzo de los vecinos y ganaderos de la zona, junto con el trabajo de los medios de extinción, permitió mantener el fuego a raya. «Comezou a cheirar a fume e cando saín da tenda xa estaba todo vermello polas chamas, entón fun correndo a unha casa que estaba ao lado onde hai un veciño en cadeira de rodas para axudalo», comenta Patricia, que se encontraba trabajando en la gasolinera cuando se desató el incendio.
«Pasamos moito medo, houbo que rociar as paredes con auga porque o lume estaba moi preto, pero afortunadamente non pasou a máis. Despois pechamos e puxémonos a subministrar auga e comida aos veciños», recuerda mientras llena el depósito de uno de los muchos vehículos de los agentes forestales que paran a repostar.
Jornada frenética
Junto a la estación de servicio se encontraban algunos efectivos de la brigada antiincendios que coordinaban las tareas de extinción. «A situación mellorou bastante porque non temos vento, estamos esperando a que despexe a néboa para que pase un helicóptero de Pontevedra», comenta uno de los agentes.
Aunque hacia el mediodía se desactivó el nivel 2 de alerta al no representar riesgo para las viviendas, el incendio continuaba con focos activos en la Pena de Francia, Rebordecovo, Bidueiros y Cubelos.

Los efectivos trabajaron a destajo para controlar los puntos calientes y poder estabilizar el incendio. Asimismo, también se afanaron en evitar que se reactivaran las zonas ya extinguidas. Por el momento el incendio continúa activo y ha calcinado más de 400 hectáreas.
Peregrinos afectados
Por los montes de Dozón discurre el Camino de Santiago, concretamente la Vía de la Plata, que pese a lo peliagudo de la situación, contaba con peregrinos que emprendían su marcha a Santiago a través de los campos quemados. No muy lejos de un grupo de bomberos que estaban apagando unos silos, Antonio y Gonzalo, abuelo y nieto de Toledo, recorrían un sendero calcinado a banda y banda.
Conscientes del incendio del día anterior, antes de iniciar su ruta desde Cea se pusieron en contacto con las fuerzas de seguridad para conocer la situación. «Nos dijeron que lo más aconsejable era ir cerca de la nacional. Ahora estamos más tranquilos, pero por la mañana nos planteamos dar vuelta si la cosa estaba muy mal»,explicaron. Ellos decidieron continuar, no como otros peregrinos que no quisieron arriesgarse. «Hubo unos ciclistas que decidieron dar la vuelta, pero nosotros andando no nos lo podemos permitir», apuntaron.

«Non hai que lamentar danos significativos»
El delegado del Gobierno en Galicia, Pedro Blanco, visitó Dozón para conocer de primera mano la evolución del incendio. Acompañado por el alcalde, Adolfo Campos Vázquez, recorrieron las zonas del núcleo urbano donde el fuego estuvo a un paso de las viviendas. «Aínda que a situación vivida onte en zonas como O Castro ou Mizoite de Abaixo foi crítica, afortunadamente non hai que lamentar danos personais, nin afeccións relevantes a vivendas e explotacións agrarias», detalló el regidor.
Asimismo, Campos tuvo palabras de agradecimiento tanto a la labor de los vecinos, que fueron clave con su ayuda para frenar el avance de las llamas en la localidad. «Quero destacar e agradecer a extraordinaria colaboración de veciños de todo o municipio, xa que acudiron con cisternas desde parroquias que non estaban afectadas polo lume», declaró al tiempo que reconocía el trabajo de los efectivos desplazados a Dozón.

«Tamén hai que recoñecerlle o inxente traballo a todos os efectivos mobilizados polo operativo de extinición, incluidos os propios do Concello, quesobre todo nos momentos de máxima tensión demostraron a súa profesionalidade para priorizar e garantir a integridade das persoas e evitar a afección do lume ás vivendas», concluyó.