La alta concentración de nitratos crece en la cuenca del Ulla-Deza

Rocío Perez Ramos
Rocío Ramos LALÍN / LA VOZ

DEZA

Cedida

Piden la declaración de la comarca de Deza como zona vulnerable

17 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

La pujante industria ganadera de la comarca de Deza constituye un importante motor económico en la zona pero a ella se le achacan vertidos al río Deza que cada poco tiempo vecinos y colectivos, entre ellos algunas formaciones políticas, vienen denunciando especialmente en los concellos de Silleda y Vila de Cruces. Una situación que avala un estudio realizado por Ecoloxistas en Acción, que acaba de presentar su primer informe sobre el estado de la Rede Natura 2000 en Galicia. La primera parte incluye la provincia de Pontevedra evaluando cuatro zonas de gran valor ambiental. Una de ellas es el sistema fluvial Ulla-Deza y otro el complejo intermareal A Ramallosa como zonas de especial conservación incluidas en la Rede Natura 2000.

A ellas suma en ese estudio la evaluación de la situación en los sistemas montañosos de la Serra de A Groba y de la de O Suído.

El colectivo echa en falta en estas zonas el deterioro ambiental que, dicen, se está produciendo denunciando que las dos zonas protegidas carecen de los pertinentes planes específicos de control y gestión «maila a ser obrigatorios segundo a Directiva Hábitats» y denuncian «un incumprimento sistemático da lexislación ambiental europea e estatal por parte da Xunta».

En la zona del Ulla-Deza indican que «a bacía está cada vez máis afectada por unha alta contaminación en nitratos». Explican que «a contaminación por nitratos en ríos é un problema ambiental significativo» y que achacan «principalmente a actividades humanas como a agricultura intensiva e a xestión inadecuada de augas residuais». Desde la agrupación reclaman a la Xunta la declaración de zonas vulnerables a nitratos en la comarca de Deza para hacer frente a este problema y adoptar medidas que reviertan la situación.

Vertidos de purín

Para la agrupación las principales fuentes de contaminación difusa en la comarca dezana «adoitan a ser actividades agrícolas e gandeiras intensivas». Destacan concellos de la comarca dezana como son los de Silleda y Vila de Cruces «que contan cunha significativa cabana gandeira sobre todo porcina, que xera grandes cantidades de xurros». Indican que los nitratos pueden llegar a las aguas superficiales y subterráneas a través de la escorrentía agrícola, fugas de sistemas sépticos y descargas de aguas residuales «alterando o equilibrio ecolóxico e representando un risco para a saúde humana».

En el informe del sistema fluvial Ulla-Deza, el ZEC (Zona de especial conservación en Galicia incluida en la Rede Natural 2000), Ecoloxistas en Acción incluye la zona del río Sar, del río Deza y el estuario con los Lombos da Ulla que, apuntan, «tamén está sufrindo un grave deterioro ambiental causado principalmente pola contaminación industrial e o impacto de infraestruturas de diversa índole».

En este último punto se refieren, dicen, a la construcción desmedida de viviendas y edificios que reduce la extensión de los hábitats naturales como bosques, praderías y humedales que se convierten, indican, en fragmentos aislados.

Una situación que afecta especialmente a parajes más turísticos poniendo como ejemplo la playa de A Ladeira en Foz do Miñor, declarada, dicen, Rede Natura y que alberga «especies en perigo de extinción». Pese a ello, indican desde la agrupación, «segue estando ocupada por unha gran instalación turística de gran impacto ambiental».

Planes de control y gestión

Consideran que la carencia de planes específicos de control y gestión impide «unha protección efectiva da biodiversidade e vulnera dereitos ambientais recoñecidos». Algo que, dicen, «sucede con toda a Rede Natura 2000 galega a pesar de ser o territorio europeo con menos extensión de territorio protexido, apenas un 10 %, moi lonxe incluso de comunidades autónomas do propio Estado español que como na de Madrid as zonas de especial protección chegan a superar o 40 % do territorio total».

El impacto de la construcción de grandes infraestructuras en los hábitats

En el informe se incide también en cuestiones como la construcción en este espacio de la Rede Natural 2000 de grandes infraestructuras como carreteras, ferrocarriles, embalses y líneas de alta tensión que, en opinión de este colectivo, tienen graves consecuencias para la diversidad. Unas construcciones que, indican, «causan unha forte fragmentación do hábitat» actuando como «barreiras físicas que impiden o movemento das especies, reducen a diversidade xenética e dificultan a recuperación dos ecosistemas». En el informe se analizan con detalle los hábitats de la cuenca Ulla-Deza y destaca que la Directiva Hábitats obliga a mantenerlos en un estado favorable, considerando que resulta prioritario restaurar y mitigar esos impactos.

En la zona destacan otras circunstancias como « a expansión de matogueiras secas» que achacan a un proceso de abandono agrario en algunas zonas, incendios recurrentes e introducción de especies invasoras recordando que «as Directrices da Paisaxe de Galicia instan a mantener estos hábitats «ben estruturados e ecoloxicamente resiliente», algo que creen, en actualmente no se cumple». Consideran que existe masificación turística en el entorno de la Fervenza do Toxa en Silleda y abogan por una gestión sostenible y compatible con la conservación y denuncian una falta de continuidad en la planificación ambiental alegando que la gestión de la ZEC Ulla-Deza «depende de actuacións fragmentadas como regulamentos de pesca e obras puntuais, sen seguimento técnico nin avaliación continua» y advirtiendo en la zona de «ameazas» como el proyecto de Altri.